La Algaba - Sevilla

Otro fracaso estrepitoso el vivido en la tarde de hoy en el campucho de Nervión. Un timorato y errático Sevilla no ha sido capaz de doblegar al colista, y un mar de sonados pitos convertidos en frustraciones han aparecido al final del partido, mayormente, por el partido propio de vagabundos (y van mil) de los llorones. Hoy también habrá conspiración paranoica de los árbitros en contra del Sevilla ¿? Hoy también echarán las culpas a la actuación del equipo arbitral que tantas y tantas veces les ha regalado últimamente los escasos partidos en los que el club ha sacado algo positivo esta temporada ¿? En mi opinión, el llevarse las manos a la cabeza ante estas actuaciones tan inmundas y repugnantes sólo demuestra una pobre autoestima y un peor juego, que se ve reflejado cada domingo sobre el terreno de juego, hasta unos límites que rozan con lo tragicómico.

Hoy es de esos días en los que la planificación del chirigotero muestra todo su esplendor. En frente un equipo flojo. Un colista, con todos los respetos, que no viene sacando puntos de sus visitas, y que se presentó muy seriamente a plantar cara al segundo equipo de la ciudad. Y le ha salido bien la jugada. No todo lo bien que quería, porque lo único que les valía frente a un puñado de ineptos era la victoria. Pero aún así, lo suficiente para sacar los colores a todos los que han contemplado este espectáculo bochornoso de un Sevilla roto y sin recursos. Los peores parados, como siempre, los pobres aficionados que vuelven a sus hogares sin una triste migaja de pan que echarse a la boca. Sedientos de juego, con un agudo sinsabor, sin la salsa del tiralíneas que tanto se huele en La Palmera, y sobre todo con una anorexia en el casillero galopante. Nada de lo que sorprenderse a estas alturas, desde luego. Otro día de sufrimiento, para una afición machacada a base de palos.

Los sollozantes espectadores de la comedia no han podido sino despedirse del campo como sólo una afición puede hacer. Quejas y protestas miles ante un Consejo de Administración dictatorial y roto por la crisis deportiva e institucional. Los pagos de nóminas millonarias sufren el peligro de quienes quieren y no pueden. Futbolistas que no saben qué es un esférico cobrando auténticas sumas de dinero que a este ritmo el Sevilla no podrá hacer frente, pues se ha vendido un proyecto de champion, cuando en realidad el equipo está a un mundo de conseguir sus propósitos, y del consiguiente nivel de ingresos necesarios. Para muestra, la humillante derrota en la previa de champion, que ha situado al conjunto nervionense en una posición muy desafortunada en lo económico. . Y en medio de todo, un aficionado que no sabe dónde esconderse. Salir los lunes a la calle se convierte en una misión de alto riesgo, pues la vergüenza que se sufre sabiéndose perdedor día tras día es sólo comparable con el fracaso de una opción deportiva desacertada. Cada minuto que pasa, el sevillista añora tiempos mejores, pero la clasificación sólo dice una cosa clara: salvémonos cuanto antes y empecemos una temporada nueva. Echemos a toda la plantilla, y dejémosle a nuestro presidente las cosas claras, empezando por conocer que la masa social sevillista no lo quiere ver ni en pintura.

Una muestra más de vulgaridad. El mercado de invierno tampoco ha sabido descongelar las ideas sevillistas, y la previsión deportiva de la que tanto ha hecho gala el chirigotero, estalla por los aires. El segundo equipo de la ciudad en conocer la máxima competición continental ha vuelto a hacer aguas, y lo peor del asunto es que nadie quiere hablar de un posible descenso. En una situación diametralmente opuesta se encuentra el Real Betis, insigne alarife del fútbol sevillano, y torrente de juego que enamora a propios y extraños. Un equipo con garra, fuerza, que sabe triangular y sacar el balón jugado. No siempre saldrán bien las cosas. No siempre se ganará. Pero jamás este equipo sufrirá la degradación y la humillación de vender los abonos más caros de España para ver a un equipo sin aspiraciones. Las escasas veces que no se gane, el equipo dará la cara y nadie se esconderá. Todos pedirán la pelota, y se mirará al rival con humildad y respeto, sin perdonarle la vida a nadie, como suelen hacer los simpatizantes de las etapas más oscuras de la historia española. Por fortuna, ya no se hacen así las cosas.

Pellegrini no se ha mordido la lengua, porque la sinceridad debe ser bandera en cualquier comparecencia ante los medios: “El Sevilla de hoy en día es de chirigota. Sobre todo porque un chirigotero, y de los malos, es el encargado de ojear y analizar a los jugadores que finalmente recalan en el club. Unos jugadores que llegan para vivir la vida locamente, ganar dinero, aumentar el nivel de sus cuentas corrientes, y reírse del aficionado. Esperaba poca resistencia del Sevilla, porque no es nadie, pero sinceramente, me han sorprendido la poca capacidad de generar juego. Los aficionados se han girado al presidente al final del partido, pero eso lo veo normal, pues lo que están haciendo con ellos es digno de estudio. No soy nadie para juzgar la labor del presidente. Que lo hagan los magistrados en los casos en los que está imputado. Pero si les digo que no sabe gestionar eficazmente un club. Tampoco el entrenador da para más, y el resultado que tenemos es que sin hacer nada digno de mención, hoy los hemos humillado. En realidad esto disgustado, porque con un equipo tan flojo y predecible como el Sevilla, debíamos haber ganado, cono hacen casi todos sus rivales. Hoy tendrán también la excusa del árbitro. Son auténticos gays. Llorones de cuarta. Sin embargo, el Betis sabe lo que hace. Es un cohete, directo a sus objetivos. No siempre vencerá, como es lógico, pero la impronta que deja en sus enfrentamientos al rival es de auténtico líder. Esta mañana le robaron el partido. Los rivales saben que se encuentran frente al líder, y salen sólo a defender. Interminables faltas que no terminaron con ningún jugador del Recre en la caseta. Pero da igual. Este equipo tiene fuelle para rato, y siguiendo con la actitud que ha tomado desde principios de temporada, todo irá sobre ruedas. No tienen de qué preocuparse, sin duda”

Esta es la realidad de un equipo que intenta sacar algo en cada partido, pero que toma la ineficacia por bandera. Un conjunto el Sevilla, que nunca sabe plantar cara a los partidos. Como tampoco perforar la portería rival en copa. Ni un solo gol al Madrid. Mientras, el Real Betis aniquila en casa al todopoderoso Barça, mejor equipo del mundo, endosándole tres magníficos y espectaculares tantos. Datos reales. Eficiencia en estado punto. Seriedad en la planificación de futbolistas. Humildad en todos los estamentos del club. Concordancia y comunicación. Ausencia de charlatanes. En definitiva, un club que sabe lo que quiere, que no es otra cosa que conseguir los objetivos marcados. Por ahí ha de empezar Del Nido a planificar la próxima temporada. Desde la sabiduría que marca la pauta en el coliseo verdiblanco.

Qué ruina de equipo....

Como no puedo leer el quijote...solo te digo que nos comeremos los boquerones con las gambas de Huelva.
A ti se te habran indigestados, nososotros no hemos perdido tu SI.

PAGA O DESAPARECE, A 2º b. yA.....

No aguanto más. Otro año más. Otra vez. No quiero ser de este equipo de ladrones e imputados. Ayer también pasé vergüenza de ser del Sevilla. No teníamos bastante con los fichajes que nos han hecho a cambio de vendernos los abonos más caros de toda España a cambio de humo, porque en Europa no hemos ni pasao la ronda previa, que ayer vamos a Málaga y salimos bien sacudidos. De nuevo. Para no variar. Primero vamos a por Giovani Dos Santos, y nos la meten. ¿Qué nos traemos? A un tal Baboso o Babá creo que se llama, que viene de Portugal y no está ni seleccionado para la CAN. Ayer ni la olió. Queremos un defensa porque se nos va la gente, harta de oler a miseria. Por Cáceres se nos viene que va a llegar uno de los bastiones defensivos de la liga, como es Alvaro. ¿Y qué nos traen? A un tío que lo soltamos en verano porque no valía ni pa recoger chatarra. El tal Cala que por lo visto jugó en Cartagena y de lateral, porque no tenía sitio como central. Ahora resulta que dice el presidente que es el elegido, cuando la realidad es que no hay un duro y estamos de deudas hasta las cejas, pues estamos fuera de todas las competiciones que nos prometieron en verano. Hasta Armenteros se va al Rayo, buscando algo más de fútbol. Reyes ni las ve. Ayer ni la tocó. Y claro, con todos estos ingredientes, era muy previsible que pasara lo que pasó. Que salimos de Málaga avergonzados. Como siempre. Creo que con suerte nos salvamos y punto, porque hay en España muchos equipos superiores al Sevilla. Ejemplo, el Betis, que sabe ofrecer a sus aficionados lo que a nosotros no nos dan. Nos ganan todos. El otro día, ni con la ayuda del árbitro pudimos marcar. Y eso que se tragó un penalti a favor del Betis de libro. Pero ni por esas. Valencia, Español, Vallecas, Málaga.......Lo diré alto y claro para que se enteren todos los sevillistas que nos leen. Que le den a este equipo. Desde ahora no vuelvo a ver más un partido del equipo del que reniego desde ya. Que cada cual haga lo que quiera, pero se acabó el llorar por un conjunto plano y timorato. Llevo mucho tiempo queriendo decirlo, pero desde este momento, me voy a La Palmera a ver espectáculo. Esto no hay quien lo aguante. Tenemos un presidente de pacotilla, y un director deportivo que encima que lo renuevan para seguir haciendo el ridículo. Que le den al Sevilla. Yo me voy, y no vuelvo, porque siento bochorno de haber sido sevillista. Lo de anoche fue la gota que colmó el vaso. No hay ni una pizca de orgullo en Nervión, y eso se ve desde que llegas al campo hasta que te vas. Basura es este equipo. Vota IU.