Villalba de Guardo - Palencia

LA VIDA DE LOS HOMBRES.
Muchas de las cosas dichas en la vida de las mujeres valen para la vida de los hombres.
Nacer varón en el pueblo, era nacer con una pequeña ventaja o plus sobre la mujer. No sé, si será por el machismo imperante en la sociedad,por la educación recibida o la fuerza bruta y trabajo duro necesario en muchas tareas del campo.
Tenían más libertad que las mujeres y su educación también era diferente en muchos aspectos. Pero, no tomemos esto como una discusión o debate sino como una información necesaria para entender un poco la vida de entonces.

LA VIDA DE LOS NIÑOS
Aunque había muchas tareas compartidas con las de las niñas porque a esta edad poco se diferenciaban los trabajos de unos y otras. Ya se comenzaba a diferenciar la educación de los mismos. Sobre todo en lo referente a las tareas de la casa y lo llamado estrictamente "femenino"; coser, limpiar, planchar, cocina, etc
Es cierto, que siempre que había que hacer una tarea de usar más fuerza bruta se recurría a los niños y si eran de la casa a las niñas. Y, además si había que dar responsabilidades y confianza en algo, el varón, desde niño gozaba de cierta prioridad
Los trabajos, algo más específicos de los niños, estaban más relacionados con el campo, los animales y la fuerza y hasta había uno, que era prácticamente específico, el de pastor.
Ciertamente el zagal, en tiempo de la época del nacimiento de los corderos podían desempeñarlo tanto unos como otros para ayudar al pastor. Pero ser Pastor, en solitario, fueron muchos los niños que antes de dejar de serlo, y llegar a jóvenes, ya ganaban su jornal con este
oficio.
Muchas veces, la vida en el pueblo te hacía madurar como persona, antes de que tu etapa biológica llegase a término.
Había momentos, circunstancias y hechos que aceleraban tu proceso normal y quemabas etapas naturales en poco tiempo. La vida, dura ya de por sí, aceleraba el ritmo según la necesidad.
Pero , en términos generales, era una vida feliz, asumida como tal y llena de pocos sobresaltos, Asumíamos lo que pasaba y disfrutábamos a tope los ratos que nos quedaban libres sin importarnos si el compañero de juego era niño o niña.

Amigo Luis; así era más u menos la vida y las costumbres en los pueblos.


Un saludo amigo