Cuevas de San Marcos - Malaga

EL DEBATE QUE VIENE

Una vez se haya solucionado el problema del ALAKRANA ('Alacrán' o 'Escorpión', en la lengua de Cervantes), se nos va a echar encima un debate que amenaza con levantar no pocas ampollas en el neuronas de más de uno y que va a poner de manifiesto las consecuencias del frenesí nacionalista de algunas comunidades autónomas, como es el caso del País Vasco.

En efecto; el caso del 'Alakrana' ha puesto sobre la mesa el comportamiento de numerosos buques vascos, que se niegan a enarbolar la bandera española. Tan pronto como alcanzan aguas internacionales, se apresuran a retirar la insignia nacional y colocan la bandera regional vasca, pese a que todos los barcos están obligados por ley a navegar con la bandera del país en el que está su puerto. Este comportamiento infringe el Derecho Marítimo y convierte al buque que así actúe en un 'barco pirata' o, en el mejor de los casos, en un 'barco apátrida', por cuanto la ikurriña no representa a ningún país. El buque 'Alakrana' no enarbolaba la bandera española cuando fue abordado.

Lo cachondo del asunto está en que, pese a renegar de la insignia española, cuando estos barcos 'apátridas' tienen problemas de abordaje y secuestro por parte de piratas, enseguida se deshacen en gritos, exigiéndole al Estado cuya bandera abominan que les dé protección y, llegado el caso, los defienda. Pero la paradoja va más allá, ya que los partidos nacionalistas, que siente auténtica fobia por la insignia nacional, exigen que el Ejército embarque con los atuneros para protegerlos, olvidando descaradamente que rechazan la presencia de los militares en Euskadi.

El caso más famoso de esta conducta ilegal ocurrió en abril de 2008, cuando el atunero 'Playa de Bakio' navegaba en aguas cercanas a Somalia y fue secuestrado por piratas de ese país. En el momento de ser abordado, el buque español navegaba como un buque pirata, por no llevar enarbolada la bandera del país a que pertenece, según establece la normativa internacional en vigor suscrita por España. En concreto, el artículo 92 del convenio internacional del Derecho del Mar, que textualmente dice: “Todo buque navegará bajo pabellón de un solo Estado y quedará bajo la protección de dicho Estado, que deberá garantizar su seguridad en alta mar”. En artículos sucesivos se advierte de que, en caso de que un buque navegue sin llevar enarbolada la bandera que le corresponde, la ley considerará ese barco como un buque sin nacionalidad, lo que implica que la autoridad marítima está facultada para interceptar, inspeccionar y retener dicho buque.

Pese a ello, el 'Playa de Bakio' tuvo la ayuda de la Armada española, que envió una fragata a la zona y liberó a los marineros del cautiverio, si bien se especula que se pagó un rescate a cambio de su puesta en libertad, lo cual creo posible por tratarse de un país como el nuestro, que tiene un Gobierno débil y acomplejado, con un ejército que sólo sirve para desfilar una vez al año por el Paseo de la Castellana y disminuir en algo los índices de paro.

Por otra parte, hay dejar constancia de que no sólo los barcos vascos se niegan a cumplir la ley; hay puertos, como son los casos del puerto de Getaria o del de Bermeo, donde sólo ondea la ikurriña, y por ninguna parte se alza la bandera nacional. Sólo en las Comandancias de Marina puede verse la insignia de todos los españoles, incluidos los vascos, y, a mi modo de ver, sólo con la intención de evitar que se olviden los colores de la bandera nacional.

En otra ocasión, y muy relacionado con este problema, dirigiré unas palabras a los partidarios de abolir o disolver el Ejército y la Policía, y ponernos todos en manos de la buena voluntad del prójimo.

SeVe

estoy totalmente de acuerdo contigo

Yo también estoy de acuerdo con el primero, y con el segundo; y con el autor del artículo.

Es que esta gentuza pertenece a la "casta", por lo tanto son "intocables".