Cadalso de los Vidrios - Madrid

VEINTICINCO AÑOS DE ESTAR JUNTOS Y UNA AMISTAD IMPERECEDERA
(FERIA TAURINA CADALSO-15)

Veinticinco años de estar juntos este año se han cumplido. Para ti adornos, pintura, sol y sonrisas. Para mí el magnífico libro que te ha escrito el cadalseño Jorge García Escudero, Veinticinco años de la Monumental Metálica de Cadalso. Ningún aficionado taurino que se precie puede quedarse sin él a no ser que quiera que su afición permanezca incompleta para siempre. Ya posee ella el libro que se merece como cadalseña ilustre que es. ¡Enhorabuena!
Cada año me digo que el siguiente no haré este resumen festivo-tauro-cadalseño, pero al final me puede la tradición y torno a confeccionarlo con mayor esfuerzo que el pasado. Cada vez me cansan más estas cosas y el desaliento va gobernando muchas de aquellas inquietudes que antes tanto me entusiasmaban, el toreo no es excepción. Más bien diría que es el principal paradigma de lo que apunto. Me estoy haciendo mayor desde hace cuarenta años…
Este septiembre luce jovial y preciosa nuestra plaza de toros Monumental Metálica. Han tenido el buen gusto de pintarla por dentro con la bandera de ExEspaña (oficial desde 1785 a 1931 y desde 1939 a 2015) y da gusto verla. A mí no me importaría que, si la mayoría lo decide, se elija como bandera de ExEspaña la conjunción de los colores de la actual con los de la II República ExEspañola (oficial desde 1931 a 1939). Servidor, de hecho, cuenta con esa unión banderíl en varios lugares y prendas que poseo. Cuando se oficialice, si eso sirve para unir a todos los españoles, podrá repintarse en nuestra plaza de toros. El señor que me fabricó esta original enseña nacional me dijo que lo veía difícil. Son dos bandos irreconciliables, añadió él. ¡Basta de tanta desunión!, respondió servidor.
Este año hemos contado con nueva empresa taurina, Gerentoro Siglo XXI S.L., que intentó mantener el prestigio de nuestra plaza que durante las últimas temporadas, gracias a la buena gestión del Ayuntamiento, ha adquirido con nuestra asentada Feria de Novilladas. En estos tiempos en que los “visionarios-antis” están ganando terreno a gran velocidad es importantísimo hacer las cosas bien y mantener siempre la dignidad. En mi modesta opinión creo que un “reciclaje” de las anquilosadas mentalidades taurinas acompañadas de una férrea unión en la defensa de una estrategia común es imprescindible. Se debería aprovechar el venidero invierno en rearmarse para poder, primero, parar los avances de los animalistas y, más tarde, contraatacar. Si ellos ven una movilización organizada explicando y defendiendo la cultura taurina y, además, la mayoría de los taurinos y aficionados retiran su voto a las organizaciones que, solapadamente, están combatiendo la Tauromaquia se lo pensarían mucho mejor. ¿Dónde está su fuerza? ¡En el voto!, retirémosele como primera medida… En este país pendular tendemos a devorarnos como Saturno hacía con sus propios hijos. Es desmoralizador observar como cíclicamente nos combatimos para hacernos más débiles y vulnerables mientras observamos la diferencia con los países de nuestro entorno (Francia es buen ejemplo en el tema que nos ocupa). En fin, por ahora ya está bien, sigamos con nuestras Fiestas.
El tiempo no acompañó y prácticamente padecimos durante todos los días lluvia y frío. El ilustre Pregonero de este año fue nuestro campeón ciclista Alejandro González, “Yiyo”, nos exhortó a foráneos y visitantes a divertirnos y a respetarnos generando una convivencia grata entre todos. Palabras sentidas y escuetas que demostraron -una vez más- que lo bueno si breve dos veces bueno (tengo que aplicarme el cuento). Enhorabuena a Alex y muchísima suerte en sus futuras competiciones que dejarán –seguro- su nombre y el de Cadalso en lo más alto del podium. Se echó encima la noche de La Pólvora y aunque ésta se celebró con gran despliegue de ruido, alegría y color no sucedió lo propio con el baile en La Corredera ya que comenzó a llover y se suspendió.
Amaneció soleado el Día del Cristo y el pueblo entero acompañó a su Patrón por nuestras calles emocionadas. En la calle Juan Ramón Jiménez me hice una foto de gala junto a mi mujer, Paloma, y mis hijos, Miguel y Berta. Otra más en el bar Vigi con mi amigo de siempre, Vicente; además de varias con mis hermanos, “Porras”, Hilario, Santiago, “El Cadalseño”, Nieves, Verónica, Juanito, Samuel… Todo eran sonrisas y alegrías, a saber el año que viene… Después confraternizamos todos por los lugares habituales esperando la hora del maravilloso pasacalles que nuestra Unión Musical realiza, cada tarde, desde la Plaza del Pueblo hasta la Plaza de Toros. Me sobrecoge ese acto. No lo puedo remediar. Es de las cosas más sentidas que vivo durante las Fiestas. Ver pasar la Comitiva Musical, Municipal y Festiva por nuestras calles es algo que me llega directamente al corazón. Algunos nostálgicos y melómanos empedernidos les siguen emocionados. Balta es uno de ellos. Cada tarde le vi pasar, con sus ojos enrojecidos (los ocultaba bajo el paraguas), acariciando el suelo y sus recuerdos con un caminar armónico. Es un romántico sin solución…
Un rato antes, todo era algarabía y felicidad en compañía de las Peñas: Los Demás, Las Cadalseñas, Los Colegas… Homenajeaban a la decana y pionera de esta revolución de alegría: La Muñana, que cumplía Cuarenta Fiestas del Cristo continuando inasequible al desaliento. Veinte años tenía yo entonces y sigo conservando aquella camisa blanquiazul con ese azul más clarito y que hoy reluce con una intensidad sólo comparable a la que, en ocasiones, adorna nuestro cielo celeste –único- cadalseño. Tengo dicho que esa camisa me acompañe cuando parta de esta vida. ¡Éramos tan jóvenes…! ¡Enhorabuena Muñana!
Directamente los cuatro hermanos muñaneros nos teledirigimos a la barra de la Monumental Metálica la tarde del 14/09/15 mientras iban saliendo al ruedo seis novillotes de Victoriano del Río (con su crotal y todo en las orejitas). Bondadosos, recogidos, nobles y fijos en los engaños y con ese trote cochinero inconfundible que parece que en vez de avanzar (correr sería demasiado decir) se mecen. Ante ellos se hicieron presentes los novilleros: Gerardo Rivera, mejicano, (silencio con aviso y oreja). Ginés Marín (dos orejas y dos orejas con aviso) y Jesús Martinez (dos orejas y oreja). Con estos elocuentes trazos se va escribiendo parte de la Tauromaquia actual, de la que forma parte inseparable el detalle social del regalo. A buen entendedor… (¿Verdad, Joaquín "Piquillo"?)
Ángel Calvo, “Jaro-Matapollos”, me emociona cuando me felicita por el Aniversario Muñanero y los hermanos “Pulses” se interesan por viejas historias de La Muñana que gustoso les refiero. La Muñana es una bella historia humana. Ese espíritu muñanero que es, también, un sentimiento cadalseño; "Paquitopirata", dixit. Tres veces me encuentro con Mariano Vicente (su hija es la guapa Mis Cadalso) y las tres luce una camisa diferente a cual más bonita. “Estamos en Fiestas”, me dice. ¡Qué arte tiene! Antonio Muro me revela que nos hará llegar una primorosa instantánea que nos tomó a Paloma y a mí en la calle. Espero impaciente. En una expendeduría de licores mi sobrino, Dani, me demanda: -No sé qué dices Migue? Le respondo: -¿Es que también tengo que saber lo que digo el Día del Cristo?
La mañana del 15/09/15 una voz me llama desde “Rúcola”. Es Tony Montón que está allí con su hermano Carlos. Nos abrazamos y paso un rato delicioso con ellos al que se une, al poco, José María Sánchez. Cuando llego al centro compruebo, como todos los días, que las calles aparecen impolutas según me dirijo –tarde- a presenciar al apartado de los novillos. La limpieza del casco urbano es admirable estos días. Hay que felicitar merecidamente al Personal Municipal. Por la tarde nos citamos en la Plaza de Toros para ver una interesante novillada de Sánchez Urbina (el 3º, “Ladino”, fue premiado como el mejor de la Feria). Los lidiaron: Aitor Darío, “El Gallo”, que sustituía a “Varea”, (silencio, pitos y silencio en el que mató por Lagartijo que sufrió en el sexto un golpe por un pitonazo en el brazo derecho), Aitor es valiente y bullidor pero hoy estuvo sin estar. Diego Carretero (silencio y oreja), recetó dos buenas estocadas y fue premiado por ello por el Jurado “Racimo de Oro”. Javier Moreno “Lagartijo” (oreja y herido en el sexto). Sobresalió el banderillero Ramón Figuerola, de la cuadrilla de “Lagartijo”, premiado con un accésit por el Jurado del “Racimo de Oro”. Aceptable entrada en tarde desapacible.
Por la noche, mientras reponemos fuerzas en la Cafetería Tereinma, Valentín Frontelo, exalcalde cadalseño, me comentó la conveniencia de colocar en el bareto de la plaza de toros un circuito cerrado de televisión. No pude por menos que adherirme entusiasta a dicha propuesta. Hemos de enterarnos de la forma de solicitar al Ayuntamiento tan necesaria e imprescindible instalación.
Con bastantes ruidos cerebrales me incorporo de la cama la mañana del 16/09/15. Me encamino al desencajonamiento y llego de nuevo tarde. Soy un caos a estas alturas de las Fiestas, incluso veo turbio y se me suben los gemelos. Pero eso no impidió que me percatara de la seriedad, pulcritud y rigor con los que se hacen todas las labores de enchiqueramiento de las reses que se correrán por la tarde. Fama tiene la Feria de Bilbao en la realización de estos menesteres; Cadalso, constato, no le va a la zaga. Al poco, me dirijo con Paloma al Coloquio Taurino, bien organizado por la Asociación Taurina de Cadalso todas las mañanas en la Casa de la Cultura y que modera con acierto su presidente, Alfredo Escudero. Interviene uno de los empresarios, Abraham Corpas, y se me viene a la mente ese pasaje del Quijote en el que El Caballero de la Triste Figura (que nombre tan bonito) se dirige a un actor en una representación que hace éste en una venta: “Llaneza, muchacho, no te encumbres que toda afectación es mala”. Estuve de acuerdo con algunas de las exposiciones que hizo Jesús Castrejón; una de ellas fue muy acertada, solicitó que se numeren los tercios-tendidos de la plaza. Seguro que nuestro Ayuntamiento tomará buena nota y en el año 2016 aparecerán los números en sus lugares correspondientes.
Tarde fría, ventosa y muy lluviosa la de este miércoles 16. Saltan al ruedo novillos de “El Retamar” (el cuarto, sobrero de Victoriano del Río, sustituía al primero, un colorao con trapío que se partió un pitón contra el burladero); flojos, se desplomaban aparatosamente, y encima me pareció observar que sus pitones no terminaban en puntas (pero como seguía viendo borroso…). El ruedo estaba en mejores condiciones de lo que cabía esperar porque el agua no cesaba de caer. Buen drenaje de la plaza e inmejorable labor de los areneros. Lidiaron los novilleros: Pablo Aguado, que resultó herido grave en la pierna izquierda, (silencio y silencio). Juan Carlos Carballo, sustituía a Álvaro García que estaba herido, (silencio y vuelta). Jesús Enrique Colombo, venezolano, reemplazaba a Posada de Maravillas, (dos orejas y dos orejas y rabo). Colombo nos deleitó con sus enormes deseos de ser torero y toda la tarde estuvo como tiene que estar un novillero: “con ganas”. Hay que reconocer que sacó buena tajada de la magnanimidad detallista presidencial. Fue declarado triunfador del Racimo de Oro 2015 por el Jurado del mismo. Raúl Cervantes, de la cuadrilla de Carballo, recibirá un accésit concedido por el mencionado Jurado premiando su buena labor durante esta tarde.
Esta noche no pudo actuar en La Corredera la orquesta “Nuevo Talismán”; en el poco tiempo que les observé ensayando (enseguida tornó el agua) me agradó “su buen repertorio musical y artístico”. La noche anterior el conjunto “Vulkano” no pudo culminar su buena actuación por el mal tiempo. Una pena, porque en lo poco que tocaron se les notaba sus buenas dotes musicales y de animación. En la noche de San Juan de hace unos años rayaron a gran altura en Rozas de Puerto Real. Juan Moreno se acordaba perfectamente de ello y así me lo hizo saber. Fui a tomar un güisqui y me encontré con Juan Ramón y Loli que nos obsequiaron con un aria, su amabilidad y dos sonrisas. Y es que sólo en Cadalso encuentras momentos y gentes como ellos.
El hombre del tiempo anunciaba mejor ambiente climatológico para el jueves 17/09/15, no acabó de acertar y volvió a visitarnos la lluvia y el frío, precisamente a la hora del Festejo de Rejones. El sorteo matutino se hizo en mi sombrero. Nuestra Alcaldesa, Verónica Muñoz, siempre (que estoy) me lo pide cortésmente y todos lo aceptan. ¡Faltaría más! Hubo suerte. Todos felices. Bueno, uno dijo que tenía un agujero y que podrían salirse los papelitos… Si le hubiera dicho yo dónde le vi un agujero, seguro que hubiese sido más discreto con mi sufrido y humilde sombrero. Para maravilla la que esta tarde, en el tendido, observamos mi mujer y servidor. Asistimos a una escena de cariño y amistad impresionante. Un paisano nuestro permanecía de pie en el pasillo observando las acrobacias de los caballos. Pasó una mujer y lo reconoció. Primero se sorprendieron, luego se miraron y enseguida se fundieron en un abrazo lleno de inmortal ternura. Se separaron mirándose emocionados con sus ojos brillantes. Ella acariciaba con su mano derecha ora su pelo, ora su frente, ora su cara; la mano izquierda la tenía sobre el hombro del amigo. Volvió a abrazarle para después acariciar con las palmas de sus manos sus ojos. Hablaron aislados del mundo durante un momento interminable, intenso y feliz. Ella bajó las escaleras y al retornar volvieron a abrazarse en un postrer encuentro. Al poco, se fueron cada uno por su lado unidos para siempre por ese abrazo indestructible. Desaparecieron los ruidos de mi cabeza pero mi mirada permanecía borrosa, los motivos eran diferentes a los antes descritos. Seguro que atraparon la fugacidad de ese instante y les alimentará el resto de sus vidas. Siempre medité que gente así hace bueno a este mundo. Sus partículas amistosas quedaron suspendidas sobre el aire para que las respiremos.
Esta tarde se lidiaron seis novillos de Fermín Bohórquez vareados, flojos y, a mi poco entender, excesivamente mutiladas sus astas; dieron buen juego ante las cabalgaduras. Les hicieron frente los caballeros rejoneadores: Fermín Bohórquez (silencio y ovación). Mariano Rojo (silencio y dos orejas y rabo). Manuel Manzanares (oreja y dos orejas y rabo). Los tres han tomado la alternativa y siguen lidiando novillos (lo permite el reglamento). Igualmente, a mi parecer, intervinieron mucho en la lidia los auxiliadores; recuerdo que en épocas pretéritas (Lupi, los Peraltas, Domecq, Bohórquez (padre), Moura…) no ocurría así. En el quinto sonaba primorosamente el pasodoble “Camino de Rosas” (José Franco Ribate), interpretado por nuestra magnífica Unión Musical de Cadalso (su director, Alberto Merchán, me ilustró sobre dicha composición cuando reinaba el silencio). En modo alguno ha sido un camino de rosas la trayectoria durante esta temporada de nuestro rejoneador Mariano Rojo. Ya en el segundo, a medida que se iba asentando, evidenciaba que estaba muy seguro y que iba a más por momentos, a pesar de lo desapacible de la tarde que hizo que el público estuviera muy pasivo. No obstante, si llega a matar bien, seguro que también corta uno o dos trofeos. En el quinto se superó con creces. La tarde mejoró climatológicamente y con ella torero, caballo y toro compusieron una de las más bellas estampas que presenciarse pueda en una plaza de toros. Percibí que el caballero tenía una seguridad absoluta; pasmosa técnica; inmejorable temple y clarividente dominio de los corceles, del novillo y de los terrenos. Todo impensado para un centauro que torea últimamente tan poco. Cierto que hubo alguna indecisión que provocó pequeños desajustes, pero su faena estuvo a la altura de las grandes con las que nos ha obsequiado en los últimos años. Para mí sobró el rabo, al igual que sobraron dos orejas, de las tres que cortó, y el rabo de Manuel Manzanares. Para servidor lo realmente trascendental es que el cadalseño Mariano Rojo no pierde su fe. Esa es la medicina fundamental para volver a las grandes ferias. Rojo es mitológico e invencible, como el sabio centauro Quirón, éste nació en el Olimpo Griego y aquél en las estribaciones de la Lancharrasa cadalseña. Obviamente… ¡No hay color! En el cuarto ocurrió un pequeño incidente entre Bohórquez y La Muñana. La Muñana reconoció su yerro. Bohórquez, se me antoja, es más difícil que reconozca su soberbia. Salimos contentos de la plaza y fuimos a Casa Carabias, allí me encontré con Pilar y Ana, ellas me dieron un beso galante y yo no portaba una flor… Tomamos cañas con Antonio Acuña, madridista y cadalseño de pro, y con Jesús Yuste, afamado ciclista y presidente del festejo de rejones; me anuncia Jesús que el año que viene pondrá en práctica lo bueno aprendido en el presente. Lo hará, fijo.
Todo el mundo se encamina hacia la Plaza para escenificar el "Pobre de mí". Los contemplo y me vuelve el nudo a la garganta. ¿Qué importa? Ya no voy a cambiar. Toda mi vida lo he llevado conmigo.
Los programas más logrados de los festejos que se confeccionan en el orbe taurino los elabora José Luis Acuña Reig para la plaza de Cadalso de los Vidrios. Realzan esta Feria que en las últimas temporadas goza de un merecido prestigio y seriedad. Es el lógico resultado de las cosas bien hechas. Por eso la reputación de los Premios Racimo de Oro están consolidándose entre los más afamados de su nivel (Arnedo, Algemesí, Arganda, Villaseca de la Sagra, Calasparra, Villa del Prado…) Pero tengo la impresión de que en las últimas ediciones de nuestra Feria de Novilladas se está bajando el rigor en la concesión de trofeos rozando el triunfalismo populista que, creo, desmerece a la categoría alcanzada. Pienso que no se trata de negar trofeos a quien se los gana en buena lid, pero tampoco regalarlos a quien no alcanza un justo nivel porque, entonces, estaríamos cometiendo un agravio comparativo. Aunar y equiparar unos mínimos criterios en los equipos presidenciales buscando la uniformidad me parece imprescindible. Si, además, consiguiéramos la unión entre todos los aficionados, la Asociación Taurina, la empresa, el Ayuntamiento (que apuesta sin ambigüedad por los toros) esta plaza se dispararía hacia las cotas más altas de prestigio.
Es otoño. Las avecillas ya no cantan al albor. Por las silenciosas calles de Cadalso caminan pensativos duendes solitarios. Visito a mi madre y oigo la voz de Don Quijote que se acerca desde “Peroles”: -Señores, vámonos poco a poco, pues ya en los nidos de antaño no hay pájaros hogaño. Siempre Don Quijote. Siempre Cadalso…