El PP, percibido como el partido más implicado en la corrupción El PP es percibido como el partido más implicado en casos de corrupción, a pesar de ser el más votado y estar en condiciones de obtener resultados récord en las próximas elecciones generales. Según el barómetro del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas), el partido de Mariano Rajoy está en el 6,95, en una escala de 0 a 10 para medir la percepción de implicación en la corrupción. Le sigue Coalición Canaria, con el 6,72, y el PSOE, con el 6,41. Esa percepción no parece afectar a las expectativas de voto del PP, a pesar de que los españoles consideran que la corrupción y la actuación de los políticos están en los primeros lugares de sus preocupaciones. La explicación de la aparente contradicción es que, por un lado, es mucho más intensa la sensación de pesimismo sobre la crisis económica y la preocupación sobre sus consecuencias. Es decir, que puede más la preocupación sobre la crisis económica y el desgaste del Gobierno por ello que el rechazo que puedan provocar los casos de corrupción vinculados al PP. La otra explicación podría ser que el sondeo oficial muestra una cierta resignación de los ciudadanos sobre la corrupción, viéndola como casi irremediable. Así, la mayoría está de acuerdo o muy de acuerdo con que hay corrupción porque forma parte de la naturaleza humana y siempre existirá y no es algo propio de la cultura española. Y un 85,9% cree que la corrupción existe porque la Administración la permite y no la persigue lo suficiente, es decir, disculpando a los políticos. Un 79,4% valora la honestidad en los políticos, pero hasta un 24,8% prefiere un político eficaz, aunque sea más bien corrupto, según los datos del sondeo oficial. Los españoles entienden que las entidades más afectadas por la corrupción son las comunidades autónomas y los Ayuntamientos, por encima de la Administración central y las instituciones europeas. El sondeo del CIS muestra que los españoles son conscientes del problema de la corrupción, porque el 85% de los encuestados sostiene que la corrupción está muy o bastante extendida en España. En cuanto a las medidas a adoptar, la impresión es que en España las leyes son muy suaves para castigar los casos de corrupción. Por eso, el 44,1% considera que hay que poner penas más duras a los corruptos. El 25,8% asegura que hay que prohibir por ley que los imputados puedan presentarse a las elecciones, mientras que el 17,5% sostiene que es preciso mejorar los sistemas de control en la Administración, para evitar que lleguen a producirse. |