Puerto Serrano - Cadiz

En estos "DÍAS DE AGUA" (lloviendo) me vienen a la memoria ciertos recuerdos de niñez. Sí, ya sé que pueden parecer cosas de carrozas, pero como no está el tiempo para estar por ahí, pues así cuento algunas cosas.

En primer lugar, recordar el brillo de las calles. Sí,-- cuando llovía--, de las PIEDRAS de las calles, porque las calles ANTES estaban más o menos empedradas, incluso algunas sin empedrar como LOS CORRALESe en la que se formaba un fanguizal de aquí te espero.

La COPA. No, no es la COPA DEL REY. La Copa se le decía al brasero, si al brasero de cisco. El que se encendía a veces en la calle pidiéndole UNA ASCUITA a la vecina y soplándole con un SOPLAOR. El que se removía con una paleta o con el ZANCAJO. También el que me lo hizo pasar fatal una vez, ( lo dejó mi madre dentro de la casa) y tuvimos que ir al médico con vómitos y dolores de cabeza.

SOPLAOR= Soplillo redondo de palma.
ZANCAJO= talón (descalzo o con zapato)

El FRIO. Sí el frio, que antes NO había tantos anoraks, ni tantos chaquetones. etc., pero aunque íbamos ABRIGAOS los pantalones eran CORTOS con lo cual las piernas siempre al aire.

Los MOLLETES Y BLANDOS. Esas muchachas pregonando por "LAS MAÑANAS TEMPRANO": molleetes calentitoooooos-blandos.Envueltos en su paño blanco; los molletes son como los de ahora pero los BLANDOS, no sé si todavía se hacen.

AH, y las BOTAS DE AGUA. Esto era LO MÁS. Eso de meterse en un charco con la bota de agua y a ver quien se metía más HONDO. Al final todos terminábamos inundados los pies y con las botas llenas de agua. Después se secaban en el brasero y a nosostros NOS CALENTABAN también. Pero nuestra envidia eran los que las tenían más altas- hasta la rodilla- pues las normales eran hasta media pantorrilla, y esos si que podían meterse en harcos hondos.

AH, y bueno perdonad que no haya hablado del MADRID-BARSA, de las ELECCIONES CATALANAS y etc. etc.

SALUDOS

me ha encantao.Yo no soy muy mayor pero recuerdo la copa de cisco de mi madre y el olor de las calles cuando al atardecer empezaban a encender las copas, lo de los molletes por la mañana no lo he vivido pero mi madre me cuenta que ella tambien vendia.Espero que mas gente se animen a contar cosas de las de antes para que no se olviden los buenos y los malos momentos de entonces

y deciamos:
menea la candela...
se escuchaba arremangando la copa
y ese calor que entraba en el cuerpo
se notaba mucho mas caluroso que ahora
sin embargo por causa de limpieza
nos hemos adaptado a las copas de bombonas
y braseros de luz