ALGO MÁS DE LA HISTORIA DE ALÍA La historia se remonta al conflicto entre Alfonso X el sabio y su hijo Sancho IV y se debió a que el hijo mayor de Alfonso X, el infante don Fernando de la Cerda, murió en 1275 en la guerra contra los moros y Caballeros, Hermandades Castellanas y la Ordenes Militares obligaron a que fuera aceptado como rey al segundo de los hijos de Alfonso X, llamado Sancho IV, alegando que Sancho era el mas idóneo para luchar con los musulmanes, en detrimento a los hijos de Fernando a los que correspondía la herencia. Alfonso X desheredo a su hijo y proclamo herederos a los infantes de la cerda (hijos de Fernando de la Cerda), pero su testamento no fue respetado y Sancho siguió siendo rey hasta su muerte. En este conflicto entre padre e hijo los nobles e hidalgos de Talavera apoyaron a Alfonso X, lo que provoco la represalia de Sancho IV que protagonizo los desgraciados hechos de Puerta de Cuartos, donde se descuartizó a cuatrocientos caballeros y cuyos pedazos fueron colgados de la puerta. Se dice que pasado un tiempo y con el deseo de reconciliarse con Talavera, el rey Sancho IV concede a Talavera tres grandes dehesas para ser repobladas, entre las que se encuentra la dehesa de Juan Román y los bosques y montes cercanos al rio Guadalupe, mas tarde conocidos como dehesa de los Giadalupes. La población de Alía es más antigua que la de Guadalupe y se dice que sus primeros pobladores procedían de Alía, aldea perteneciente en aquel tiempo a Talavera en cuyo término en la dehesa de Juan Román tuvo ligar la aparición de la imagen de la Virgen de Guadalupe al pastor de Cáceres, llamado Gil Corderos. |