Santa Cruz de Marchena - Almeria

FORO POR EL CAMBIO


Llamamiento al Foro por el Cambio


Queridos compañeros y compañeras:

Han sido largos estos duros años de resistencia, organización, lucha y sobre todo de muchísima ilusión. Activistas sociales, trabajadoras y trabajadores, estudiantes, expulsadas por la crisis, pequeños y medianos empresarios, jubiladas, empleados públicos… Mareas de ciudadanas y ciudadanos anónimos hemos constituido la primera línea de contención frente a la grave regresión democrática y social que padece el país. Es motivo de orgullo, por tanto, saber que somos el músculo social cuyo esfuerzo infatigable ha sembrado los vientos de cambio que recorren España.

Hoy nos enfrentamos a la oportunidad histórica de transformar la realidad institucional, social y económica de nuestro país y, por ello, consideramos que es imprescindible generar un gran espacio de diálogo donde podamos escuchar de primera mano las propuestas de los movimientos sociales y de la sociedad civil. Por eso queremos animar a todas la organizaciones, activistas sociales y ciudadanas y ciudadanos a que participen en el Foro por el Cambio. A través de las más de treinta mesas sectoriales y temá, el Foro recogerá las principales demandas y propuestas ciudadanas que servirán como materia prima para la elaboración del Programa de la Gente.

El intento de perpetuar el régimen de austeridad y la amenaza del TTIP ponen en severo riesgo el cumplimiento de la más valiosa creación social del siglo XX: la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Los derechos humanos constituyen el punto de partida de este Foro por el Cambio y su defensa nuestra más alta aspiración política para construir un país soberano y democrático.

Sois los protagonistas del cambio político en nuestro país y contar con vuestra participación e inteligencia será para nosotros un honor y un privilegio. Nos vemos el 11 de julio en el Foro por el Cambio. Caminando juntos inclinaremos la balanza.

¡Sí se puede!

5 de diciembre de 2015


Ya Ha Empezado La Campaña ¡Es El Momento!

Nuestro director de campaña y futuro Vicepresidente Íñigo Errejón, traza las líneas fundamentales de estas dos semanas históricas ¿Nos ayudas a compartirlo?

El 15 de mayo de 2011 comenzó a hacerse visible la brecha que se había abierto entre las instituciones y el país real a raíz de la ruptura de los acuerdos de la Transición por parte de las élites que emplearon la voluntad del pueblo en su propio beneficio.

Unos acuerdos que garantizaban que, si uno cumplía con su parte [estudiar, trabajar, pagar impuestos etc.] podría, independientemente de su origen, mejorar sus condiciones de vida y tener cubiertas ciertas necesidades por parte de los servicios públicos, especialmente en la vejez.

- Y que, de esa manera, cabría esperar también unas expectativas crecientes de bienestar para sus hij@s.

Con el estallido de la crisis y su conversión en estafa por unas élites que, incapaces de regenerarse, hacen pagar a la mayoría social el precio de sus excesos, una buena parte de la población, más allá de su procedencia u orientación política previa, comenzó a compartir un diagnóstico del problema:

Nuestros dirigentes no nos representan, no gobiernan para nosotros sino para sí mismos. PARA ELLOS.

Por eso Podemos surge con una orientación que, yendo más allá de viejas identidades políticas, podríamos denominar, con Gramsci, de “nacional-popular”: Una política patriótica, radicalmente democrática, que hace coincidir los intereses del país con los de sus mayoría social, en un momento en el que las élites, además de defraudar la confianza puesta en ellas, han secuestrado las instituciones y la soberanía popular y amenazan la viabilidad de la convivencia y de las condiciones de vida de la ciudadanía.

No obstante, en España lo nacional-popular requiere contar con dos especificidades que implican estrategias adicionales.

La primera es que en nuestro país conviven -y se solapan- diferentes identidades nacionales.

- Un discurso democrático que reivindique que “la patria es la gente” y ha de reconocer en pie de igualdad diferentes realidades nacionales con las que construir un proyecto común basado en el libre acuerdo y la diversidad.

- Las alianzas plurinacionales realizadas por Podemos en Galicia (En Marea Podemos), el País Valenciano (Podem-Compromís-És el moment) y Cataluña (En comú Podem) caminan en esta dirección y son uno de los motores decisivos de la remontada.

- De este modo, la candidatura del cambio, precisamente por su reconocimiento de la plurinacionalidad, es la única capaz de concentrar en la cita del 20D toda la potencia transformadora de los diversos procesos de cambio político y construcción popular que se han dado en diferentes territorios los últimos años.

La segunda tiene que ver con que nuestra relación con lo público se establece a menudo más como ciudadanía que como pueblo, es decir, que a pesar de que el sistema político esté en crisis, las instituciones han seguido funcionando sin alteraciones graves y, por tanto, siguen en funcionamiento los canales administrativos a partir de los cuales organizamos como individuos nuestra formación, nuestro empleo, la resolución de conflictos a través de la Justicia, etc.

- De ahí la importancia de la incorporación de las personas con prestigio nacional independientes en las listas del cambio, como el teniente general y ex Jemad Julio Rodríguez, la juez Victoria Rosell o el juez Juan Pedro Yllanes.

Por una parte, aportan su bagaje profesional y su prestigio, consolidando la imagen de una candidatura con los mejores, preparada para conducir el país y para mantener en funcionamiento las instituciones que dotan de certidumbres nuestras vidas.

Por otra parte, sus veteranía, diversidad y trayectorias ayudan a romper el cerco que las élites y sus generadores de opinión intentar construir en torno a Podemos, y a tenderle la mano a los sectores que aún faltan y sobre los que la campaña del miedo ha generado incertidumbres o dudas.

Gracias a esta compleja apuesta, Podemos se convirtió, especialmente a partir del 24 de mayo de 2015, en un actor decisivo de la política española.

Abrir esa brecha en el sistema político no ha salido gratis: El adversario ha respondido con dureza y el esfuerzo en acelerar también desgasta.

Ahora bien, las fuerzas y las experiencias acumuladas nos han permitido iniciar una remontada que ya todos perciben y que mantiene abiertas las posibilidades de victoria el 20 de diciembre.

Ya todos nos reconocen que hemos cambiado la forma de hacer política en este país; está bien, ahora queremos cambiar también la forma de gobernar para mejorar las vidas de la gente.

Hoy somos una organización mucho más madura tanto en el plano electoral como en el institucional y en nuestra diversidad social.

Estamos preparados para liderar el proceso de cambio que está pidiendo este país, los consensos que ya existen en la calle pero que es preciso llevar a las instituciones, como son:

a) El blindaje de los derechos sociales en la constitución y el suelo de gasto social con innovación económica y cambio de modelo productivo.

b) La reforma de la justicia para liberarla de las tutelas del poder ejecutivo y hacerla efectivamente independiente de los vaivenes del poder.

c) La democratización del sistema electoral.

d) Las garantías legales contra la corrupción y las tramas mafiosas que han secuestrado las instituciones.

e) Y el nuevo acuerdo territorial que necesita nuestro país para construir la convivencia desde el libre acuerdo y la diversidad.

- Estos cinco pasos son la clave para rehacer un nuevo acuerdo de país en la próxima década.

Comenzamos una campaña para ganar una década y la hemos llamado “Un país contigo”.

Con este lema le decimos a cada ciudadano, a cada ciudadana:

El país ha salido adelante y sigue funcionando gracias a tus esfuerzos y sacrificios.

Ahora queremos que tú formes parte de este proyecto para que el país también esté contigo cuando necesites apoyo, cuando tengas que emprender un negocio, buscar trabajo, formar una familia, sobreponerte a una enfermedad, ampliar tus estudios….

Dejar gente atrás es perder su capacidad de trabajo, de consumo, de innovación, perder la experiencia de mayores y la vitalidad de jóvenes.

Le decimos a cada persona:

UN PAÍS SIN TI, ES UN PAÍS MÁS DÉBIL

UN PAÍS MÁS JUSTO ES UN PAÍS MÁS UNIDO

y, por eso, CONTIGO ES MÁS FUERTE.


Íñigo Errejón

¿QUE GOBIERNO PARA QUÉ CAMBIO?

PODEMOS·SÁBADO, 6 DE FEBRERO DE 2016

Cuando la política acelera su tiempo se desatan toda una sucesión de acontecimientos.

La propuesta de Podemos de formar un gobierno desencadenó la semana pasada una serie de movimientos y reacciones en el resto de formaciones políticas que finalmente ha desembocado en la intención del PSOE, afirman, de formar un gobierno del cambio y de progreso.

Cada formación debe detallar su idea de cambio; qué supone, a quién beneficia y su forma de hacerlo efectivo.

Cambio para qué, para quiénes, con qué medios, qué problemas impiden el cambio, cómo se solucionan.

La prioridad no es pactar por el mero hecho de pactar, no es un cambio de caras, la prioridad es pactar para cambiar las políticas en favor de la ciudadanía.

España tiene a grandes rasgos tres retos que afrontar sobre los que cada formación debe posicionarse:

1) la situación socioeconómica,

2) la dimensión política de la corrupción y la regeneración democrática,

3) la política territorial y el proyecto de país.

Si por cambio se quiere dar a entender un cambio en las políticas económicas y la política de empleo, el problema a solucionar pasa por reducir la desigualdad y alcanzar la pobreza cero.

pasa por elevar el suelo económico de la sociedad, garantizar y mejorar los servicios públicos, reforzar el poder de negociación colectiva y promover un tejido productivo orientado a sectores de alto valor añadido.

El gobierno que priorice blindar la política social y de empleo debe también aclarar qué política fiscal pretende aplicar, lo que supone negociar con los socios europeos un cambio de sentido en las prioridades de las políticas económicas.

En lugar de aplicar nuevos recortes y un ritmo tan duro en la reducción del déficit, hay que poner el acento en la necesidad que tiene España de generar más ingresos, acercándose a la suficiencia fiscal y a la media de la eurozona, para contar con recursos que impulsen un plan de modernización económica.

Un gobierno que informe a Bruselas sobre la necesidad de relajar los objetivos de déficit y revertir el dolor de los recortes, que asfixian a la economía e impide su reactivación.

Ello es debido a la reducción de la capacidad adquisitiva de la mayoría.

Un gobierno que cumplirá con el objetivo de déficit, pero priorizará antes el cumplimiento de otros objetivos previos, como la desigualdad, el paro, o la precariedad.

Si por cambio se interpreta la urgente necesidad de cerrarle, definitivamente, las puertas a la corrupción, debe aplicarse una política integral que vaya mucho más allá de la judicialización individual de quien usa lo público para su beneficio privado.

Donde está incorporando, para su la malversación, toda la dimensión política y económica que acarrea la corrupción.

Para que haya buenas leyes que combatan a la corrupción, es necesario que existan buenas costumbres y poca desigualdad.

La democracia debe protegerse de ser cooptada por sectores económicos que ejercen mucho poder y hace inviable la propia filosofía del parlamentarismo, donde el diputado ejercita el debate y la deliberación pública independiente dentro del parlamento que encarna a ese gobierno de la discusión.

Cuando los representantes públicos mantienen reiterados nexos con grandes empresas, donde más tarde, acaban ocupando puestos de responsabilidad al salir del cargo público, estamos ante una dinámica de corrupción que rompe a la sociedad, aunque sea una práctica legal.

Nuestra democracia requiere, precisamente, de lo contrario.

Necesita acercar las instituciones a la ciudadanía, o lo que es lo mismo, democratizar la democracia ampliando el campo de la decisión, la participación y el control ciudadano dentro del intervalo de tiempo que hay entre elecciones, para garantizar que los representantes responden al marco de convivencia que la sociedad se ha dado a sí misma.

Si, por cambio, se entiende conformar un proyecto de país con un futuro sólido, es necesario atender a la fotografía real del país para entender que la diversidad, lejos de ser un estorbo o una mancha a borrar, es una fortaleza a destacar.

Cambio significa parar la política de polarización que fractura a los territorios generando desapego.

Es un hecho empírico que persistir en la misma lógica solo genera más desencuentro y empeora el problema provocando que más gente se considere independentista.

Cambio es resolver democráticamente un problema que es político, no de “los políticos”, y requiere de un trato por parte de quienes ocupan cargos en las instituciones que no pase por separar a la propia ciudadanía entre buenos españoles y malos independentistas, como si fueran, paradójicamente, ciudadanos de otro país.


Jorge Moruno

Publicado en publico.es, el 5 de febrero de 2016

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