AUMENTO DEL CENSO EN EL S.XVI AUMENTO DEL CENSO EN EL S. XVI En el fogaje de 1495 figuran los nombres y apellidos de 88 vecinos de Villalengua como cabezas de familia, unos 440 habitantes. Y en el transcurso del siglo siguiente la población aumentó tanto que en el Capítulo Provincial celebrado en el Palacio de San Juan de los Panetes de Zaragoza, el 4 de septiembre de 1590, bajo la presidencia de Fray Juan de Paternoy, en sustitución del castellán de Amposta que se hallaba enfermo, el síndico y prior del Concejo de la Universidad de Villalengua, - " miembro y porción que es de la Encomienda de Calatayud ", según dice el documento -, Antonio de Funes, presentó un suplicatorio ( solicitud ) para que se aumentara con cuatro Capellanes el número de servidores de su iglesia. Entre otras razones que expone, dice: " que según recuerdan los mayores del lugar, en su juventud no eran más de cien vecinos o pocos más ( unos 500 habitantes ), y ahora ha aumentado tanto la población que hay en él más de doscientos cincuenta vecinos, y de ellos más de ochocientas personas de comunión y otros tantos muchachos y muchachas ". ( es posible que exagerara un poco por el interés que tenía en que le mandaran refuerzos ). Sigue diciendo: " por tal aumento de población se están poniendo en cultivo nuevas tierras, abriendo acequias para regadíos, hay más rebaños... y se han realizado otros trabajos que han aumentado en tal grado los frutos de dicho lugar, y los diezmos y primicias pertenecientes a la Encomienda, que se han arrendado en más de dos mil escudos y seiscientas libras ". Sigue exponiendo los perjuicios que se derivan para los vecinos el que sólo esté él para atender al culto: " no se pueden celebrar aniversarios por los difuntos, muchos no pueden ir a misa los días de obligación porque tienen que ir de mañana al campo a guardar animales y sólo se imparte la " misa conventual ", y por no poder ser confesados y sacramentados en cuaresma muchos se tienen que desplazar a Calatayud, que dista tres leguas, y a otras partes para confesarse ". Continúa una larga y exhaustiva exposición de motivos, y los argumentos fueron tan convincentes que el Capítulo Provincial, después de oír a los comisionados que estudiaron el asunto, acordó pedir al Comendador de Calatayud, Fray Jerónimo de Homedes, y a todos los comendadores que le sucedieran en dicha Encomienda, que todos los años y a perpetuidad diera 1200 sueldos jaqueses para ayudar al sustento de los capellanes que sirvieran las cuatro capellanías, que ya estaban creadas desde hacía tiempo, pero que no tenían o eran tan escasas las rentas asignadas que por ello no se cubrían. - 1 - " Y será la primera paga en el mes de septiembre viniente de mil y quinientos noventa y uno, y así en adelante en cada un año en el dicho mes perpetuamente ". El documento sigue enumerando, por espacio de varios folios, otros emolumentos y obligaciones de los Capellanes que fueran propuestos. Está firmado por Pascual Ferruz, notario Real, y por Miguel Gómez, nuncio de la Orden del Hospital de San Juan en la Castellanía de Amposta, ambos vecinos de Villalengua. ( AHN, Encomienda de Calatayud, legajo 8193, documento nº 2 ) NOTA Es posible que el Prior aumentara algo el número de habitantes para que le concedieran los coadjutores que solicitaba, pero las grandes proporciones del edificio de la iglesia - que cinco años más tarde se acordó construir en el Capítulo General celebrado en Malta el 18 de agosto de 1595 - nos confirman que la población de Villalengua había aumentado mucho desde el fogaje o censo de 1495. Crispín Mínguez - 2 -
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