Cuidado con lo que se dice PON EL GATO AFUERA Una pareja se vistió y arregló para salir en la noche. Encendieron una luz nocturna, activaron la contestadora del teléfono, cubrieron la jaula de su periquito y movieron al gato hacia la parte trasera de la casa. Pidieron un taxi por teléfono. El taxi llegó y la pareja abrió la puerta delantera de su casa para salir. El gato que habían puesto atrás, volvió a meterse a la casa. Ellos no quieren al gato en la casa, porque siempre intenta comerse al pájaro. Mientras la mujer se mete al taxi, el marido regresa a la casa para buscar al gato. El gato huyó por arriba de las escaleras, mientras el amo se empeñó en atraparlo. Esperando en el taxi, la esposa no quería que el taxista se enterara de que su casa estaría vacía en su ausencia. Y le explica que su esposo estará afuera lo más pronto. “Él solo está despidiéndose de mi mamá”. Unos minutos más tarde, el esposo se metió al taxi. “Discúlpame por demorar mucho”, dice mientras el taxi sigue su camino. “La maldita perra se escondía debajo de la cama. ¡”Tuve que pincharla con un gancho de ropa para que saliera! Intentó escaparse, pero la agarré por el pescuezo. Luego la cubrí con una sábana para que no me arañara. Pero funcionó. Le grité que era una "cara de verga” por las escaleras y la lancé al patio!” El taxista chocó con un carro estacionado. |