Utebo - Zaragoza

Nosotros podemos

Como todo el mundo, un día, recibí la socorrida pregunta
- ¿Qué prefieres un político trincón o uno tonto?
- Hombre, por preferir, desearía uno con inteligencia standard y costumbres decentes.
- Si. ¿Pero, si tuvieras que elegir? Insistió, dándome mascada la respuesta. Un trincón puede hacerte un roto, en orden a su ambición o avaricia, pero nunca será grave para un estado. Sin embargo, uno tonto puede hundirte el país.
Típicas reflexiones para aliviar conciencias y omisiones culpables. Mira por donde, nos ha tocado el Gordo, nos salen trincones por todos lados y ¿Tontos? ¿Tontas?, ni te cuento. ¡¡AHH!! Y los tenemos mixtos, se dejan comprar con trajes y entradas para el circo. Sin comentarios.
Empiezan a flaquear mis fuerzas, dudo de la ética global ciudadana. La masa se ha vuelto posibilista y acepta lo menos malo, pero huye del compromiso y la critica. No se moja. ¡Pero si no tenemos nada que perder! ¿Qué nos detiene? ¿Qué extraño virus nos han inoculado que nos permite aceptar a toda esta panda de inútiles que están arruinando este país NUESTRO?
Usemos primero la fuerza de la Democracia. Nuestros votos. Si Vd. va a votar el próximo día 7, sepa que aparte de estar validando a unos inútiles, les estará regalando 1,22 € con su voto (Que por 6.500.000 de votos, que esperan conseguir cada partido mayoritario) son unos 8.000.000 de Euros, para el PSOE y otros tantos para el PP. ¿Se imaginan las carcajadas y el champan que puede correr en la sedes esa noche, a costa nuestra? Se me revuelve el estomago.
Solo se me ocurre un ruego personal, ¡¡Por favor no acudan a las urnas!! Dejemos vacías las urnas y que se paguen ellos las copas. Tratemos de desalojarlos con nuestros votos.