San Mateo de Gállego - Zaragoza

Hola, amigos. Y amigas, espero. Estas semanas, el foro está acorde con la economía. Triste. De capa caída. Desolado.


Pronto levantará el vuelo. Estoy seguro. Se están cocinando ciertos temas en la trastienda que darán para mucho. Y eso hará que la gente se aníme y escriba. Unos lo harán de unos temas más serios. Otros más banales, pero eso..., la cosa se animará.

Es la ley de la atracción. No se si habeis oído hablar de ella, pero es la que rige las leyes del Universo. Se atrae lo similar. La alegría y buen rollo, atrae más de lo mísmo, y las penas y negatividad...¡pues eso...! Esto lo llevo aprendiendo, leyendo y estudiando, en la cantidad de libros de crecimiento personal, que he leído. No digo que les haya sacado provecho, pero cada vez lo intento con más fuerza. Pongo en ello más pasión. Hago más incapié.

Hace muy pocos días tuve una experiencia personal, que me impactó, tanto por la positividad que hubo en ella como por la sencillez de la mísma. Me expliceré:

Paseando por la carretera del canal - cosa que de vez en cuando hago -
sentí una fuerza en mi interior que me invitaba a visitar la iglesia. La nuestra. La de siempre. Ese mísmo domingo decidí asistir a la eucaristía, cosa que no hacía desde tiempos de mosen Hilario, a excepción de alguna fiesta familiar o algo por el estilo.

Pero ésta vez, fue algo diferente. Necesitaba oír misa. Estar allí con más alma que cuerpo.

Cuando, al entrar al templo, introduje la mano en la pila de agua bendita para santiguarme, sentí un escalofrío, fuera de lo normal. Sentí ganas de llorar, y así lo hice.

Tras realizar una ferviente genuflexión en el pasillo, me dirigí a oír la Santa Misa, y pongo a Dios por testigo, que hacía años que no me sentía tan bien. Fue una experiencia como pocas. Lo necesitaba. Algo o alguien me empujó a hacerlo.

Muchas veces, vamos buscando el bien estar... la dicha... la fortuna.. por medio de libros de auto ayuda, gurús de extrañas religiones o sectas de lo más chic, cuando tenemos aquí, a las puertas de casa, en nuestro pueblo, lo que añoramos y buscamos en lejanos e inalcanzables dogmas.

Haced la prueba. Tanto a creyentes como no creyentes. Teneis poco que perder, y mucho, muchísimo a ganar. Yo, lo seguiré haciendo.


Saludos. Sin acritud.

Buen intento... casi pico.

Había una parodia realizada por los geniales Martes y Trece en la que imitaban a Maria José Cantudo y a un cura que hacía el programa de Pueblos de Dios o algo así.... Al grano. A la Maria José Cantudo (ficticia) le pasaba como a tí cuando paseabas por la carretera del canal.... Sintió Algo muy profundo, una fuerza también en su interior que le decía: "Maria Josés..... vuelve al redillll...." y según el sacerdote, personaje que representaba el irrepetible Millán Salcedo, lo que le ocurría a Maria Josésss es que había encontrado la "F", sí, sí.... La "F"


Quizás tú también hayas encontrado la "F", al igual que Maria Josés....Cantudo!!!

Me alegro que te reconfortara tanto esa experiencia, y no me lo tomes a mal, pero me ha recordado un sainete muy divertido que hace años que echaron en TVE.

He encontrado en youtube el sainete de Martes y Trece. Echarle un vistazo porque está genial y no tiene desperdicio. Este es el enlace: