San Juan de Mozarrifar - Zaragoza

Trastocando el dicho de “a ver quién la echa más gorda” podríamos decir que durante este fin de semana lo que hemos venido escuchando es “a ver quién la pide más gorda”. Nos referimos a las múltiples comisiones de investigación que tanto el PP como IU han solicitado para averiguar las cuentas del Seminario. Lo curioso es que, paradójicamente, en el pasado debate sobre el estado de la ciudad, CHA no obtuvo el respaldo de los grupos políticos ni del gobierno (PSOE-PAR), ni de la oposición (PP e IU), para modificar el funcionamiento de la tramitación de la contratación municipal, garantizar la transparencia y prevenir situaciones como la que se ha producido en la que se saltan los procedimientos legales.

Nos congratula que ahora pidan luz y taquígrafos por lo que estamos seguros de que en el próximo pleno de finales de diciembre (porque en el de ahora ya no hay tiempo material para presentarlo) votarán a favor de introducir los sistemas de control exhaustivos en la contratación municipal que nos tumbaron “todos a una” en el Debate de la Ciudad. Nuestro grupo político apoya la puesta en marcha de todas las comisiones de investigación que hagan falta, pero lo primero que hay que hacer es conseguir que el Ayuntamiento de Zaragoza ponga en marcha la propuesta de control y transparencia sobre el sistema de contratación municipal, modificado en diciembre de 2007 por un Decreto del señor Alcalde, ya que, con la actual organización municipal los concejales de los grupos de la oposición (que suman mayoría en el pleno) tenemos vetada nuestra presencia en los órganos decisorios de la contratación municipal.

Por lo tanto, el grupo municipal de Chunta Aragonesista apoyará cualquier propuesta de comisión de investigación sobre el seminario pero también lamentamos que un asunto tan importante para el funcionamiento democrático de un ayuntamiento se esté convirtiendo en una guerra personal de descalificaciones en el que priman los insultos y las amenazas sobre la transparencia en las actuaciones públicas del gobierno PP-PAR.

Las sillas de lujo, la mesa colocada antes de aprobarse el proyecto que la incluía y de contratarla con ninguna empresa, y la eliminación de la biblioteca para hacer un despacho para el alcalde con un coste desorbitado son una sucesión de hechos lamentables y reprobables que atentan contra la ética y socavan la dignidad de las instituciones democráticas.

Estamos convencidos de que la única manera de garantizar eficacia y transparencia en el gasto público es disponer de los mecanismos de control que se eliminaron por decreto del alcalde Belloch, el año pasado. En el próximo pleno de diciembre, volveremos a presentar una iniciativa en este sentido, y esperamos que después de todo lo que ha sucedido y de las manifestaciones que han realizado, todos los grupos la apoyen, aunque sólo sea por respeto al Ayuntamiento como Institución.