Épila - Zaragoza

Eso le gritaban los “cachorros” del independentismo gallego a María San Gil en la Universidad de Santiago. El vídeo del lance es suficientemente expresivo. La líder del PP en el País Vasco, valiente, afrontó la violencia de los “radicales”. Estos “radicales” –recordémoslo- han crecido a la sombra del BNG, socio de gobierno del PSOE en Galicia. Del mismo modo han crecido los radicales del catalanismo a la sombra de Esquerra, socio de gobierno del PSOE en Cataluña. La absurda política pro separatista del PSOE ha terminado legitimando la peor violencia. Al hilo del suceso de Santiago, no ha faltado quien llame “fascistas” a estos energúmenos. Es el mismo lenguaje que viene usándose desde hace treinta años. En todo ese tiempo, el fascismo no ha aparecido por ninguna parte y, al revés, lo que ha crecido es esta violencia del separatismo de izquierdas. Llamemos las cosas por su nombre. Si en España hay un peligro para la democracia –y lo hay-, no viene de un “fascismo” inexistente, sino de esta caterva de separatistas engordados con dinero oficial a la sombra de los pactos del PSOE.

JAJAJAJAJAJA

Jajajajajajajajajaja, esa sí que es buena... Como está la gente de la perola...