Maña pasaselos a tu marido y que diga cual es su caso Manolo, ¿dónde vas tan corriendo a la cuatro de la mañana? Es que a mi suegra le ha dado un cólico de gambas. ¿Y vas a por el médico? No, a por más gambas. Pepe, mi madre se ha caído y se ha roto la cabeza. No me hagas reír cuando me estoy afeitando. Como vuelvas a llegar borracho me voy a casa de mi madre. ¡Júramelo! En el veterinario: Vengo a cortarle la cola al perro. ¿Por qué? Porque mañana viene mi suegra y en casa no quiero ninguna manifestación de alegría Este año mis yernos quieren que vaya de vacaciones con ellos. ¡Qué yernos tan buenos tienes! Sí, pero el de Logroño quiere que vaya a Teruel y el de Teruel quiere que vaya a Logroño. Padre, ¿por qué no me pone penitencia? Pero, ¿no me acabas de decir que tu suegra se va a vivir con vosotros? ¡Que cosas ocurren en la vida! ¿Qué ha pasado? Que mi suegra se ha ido a vivir con mi mejor amigo. ¿Cuál de ellos? No lo sé, pero a partir de ahora es mi mejor amigo. Suegra: ¡Qué sorpresa yerno, verte por aquí por mi casa! ¿Cómo es eso? Su hija me ha mandado a la mierda, y, ¿dónde iba a ir? Papá, ¿por qué está la abuela saltando por el jardín? Cállate, y tráeme más cartuchos. Pero Manolo, ¿qué te ha pasado para traer los ojos vendados? Que el otro día me topé con el genio de la lámpara, me concedió un solo deseo y ya ves como vengo. Pero, ¿qué le pediste? No volver a ver a mi suegra. ¿Y qué pasó? Que me sacó los ojos. Mariano, ¿tú qué opinas de la felicidad? Pues, no sabría decírtelo; mi suegra siempre ha vivido con nosotros. Pedro, ¿cuántos años lleva tu suegra viviendo con vosotros? Veinte años. ¿Tantos años? Sí, pero me han parecido como 10 minutos. ¿Es muy buena? Sí, déjame terminar, 10 minutos debajo del agua.
|