Calatayud - Zaragoza

Hoy estaba recordando una vieja vivencia que tuve en esa ciudad de Calatayud, resulta que alguien me gustaba, nos gustábamos, creo que no me equivoco si digo que ambos estábamos enamorados, jejeje, hoy ya ha pasado mucho de eso, el caso es que, mi actuación fue pesada, agobiante, poco respetuosa, exigente a veces,... stuvimos únicamente juntos unos fines de semana, fueron preciosos, y después, me dejó, debo decir yo tuve mucha culpa, pero sus padres prsionaron mucho, yo no les gustaba.
Sabéis, el caso es que yo en su momento me lo tomé a broma, le valoraba poco, no le tomé para nada en serio. Más tarde, cuando me dejó, en navidad de ese año le ví con su nueva pareja, fue ahí donde empezaron los celos, más que celos, empezé a valorarle, a partir de no tener su compañía, su atención, sus cartas con palabras bonitas, jajaja, ahí le echaba de menos y sólo pensaba en lo preciosos que fueron sus abrazos, estar los dos cerca, reir mientras nos mirábamos,... El caso es que pasó el tiempo, nos vimos alguna que otra vez, hablamos algún día, pero todo quedó atrás, se perdió para siempre, y ahora, ni siquiera nos saludamos cuando nos vemos, no nos hablamos, apenas nos miramos, es una pena, es muy triste de verdad.
Más tarde, con el tiempo y los años, me he dado cuenta de que, si lo hubiéramos intentado, no sé si hubiéramos durado, pero puedo asegurar, que hubiéramos sido los más felices, los más alegres y entusiastas, los más sonrientes y soñadores.
Si de algo os puede servir, cuando tengáis cerca cualquier persona, no importa quien, pero máxime si la queréis, dejadle su espacio, no exigais su completa atención, sed comprensivos y dadle, todo aquello que vosotros deseáis.
Un abrazo.