Mefisto y Mefistófeles DOS GRANDES PREBOSTES: MEFISTO Y MEFISTÓFELES. Reunión endiablada en la isla antillana, dos diablos en la Habana y la política embrujada. Mefistófeles siempre acierta con el barullo cuabano y Mefisto nunca se equivoca en el entramado del Vaticano. Tenemos dos diablos, que cada uno elija el suyo o se quede sin ninguno, dos buenos diablos. Mefistófeles salió de la revolución y lo eligieron hace 50 años, Mefisto surgió de la religión y lo nombró el Espíritu Santo. En este aquelarre tratan en conferencia con mucha prudencia de repartir el pastel. Para Mefisto y Mefistófeles el poder sin trabas y la Iglesia sin barreras como grandes prebostes. El astro que ensombrece ya se ha quemado y está amortizado el eclipse que oscurece. Las cubanas y cubanos con el sexo tienen más suerte que el gallo de Pepe Benavente y no les hacen ningún caso. El Ciego lo cuenta como lo ve y lo entiende, tal cual. El Ciego del Molar |