San Esteban del Molar - Zamora

Fuerte huevada la de don Fabricio que esta vez le tocó el trullo y no le cayó el premio de la lotería.

Don Fabricio si hubiera sido gallina, bonito ejemplar sería, le recogeríamos todos los huevos para una echada.

Le concedemos el premio a la mejor huevada por confundir la estadística con las malas artes y creer que siempre estaría acompañado de la suerte y nunca de la desgracia. Porque ningún musulmán peregrinando a la Meca, rezando a Alá y glorificando al Profeta hubiera pensado que iba a tener tanta baraka.

Ahora su hija Andrea Fabra, la supercalifragilística diputada pepera, no podrá gestionar un indulto a su padre sin que se concedan otras medidas de gracia a la población reclusa.

Do Fabricio a la sombra podrá quitarse esas gafas de soldador que lleva, pero cómo se podía creer este caballero que con esa pinta no fuera descubierto.

Los olvegueños, vecinos de la ciudad soriana de Ólvega, donde nació don Emiliano Revilla, están muy enfadados porque llaman "chorizo" a don Fabricio y eso les puede traer algún maleficio.

Por todas estas circunstancias que rodean a don Fabricio y a su hija Andrea Fabra, les concedemos un huevo con dos yemas, como premio compartido a la mayor huevada.

Para ellos y sus descendientes.

Nota: El bandolerismo hispano era más humano que el bandolerismo político de nuestra época, había bandoleros generosos como Diego Corriente, los de ahora son egoístas y acaparadores; los bandoleros eran criaturas más tiernas que partían de un estado de extrema necesidad, como El Tempranillo y los de ahora empiezan teniendo las manos llenas; los bandoleros políticos se aprovechan de su poder y son cobardes, aquellos bandoleros tenían que ser audaces, como Luis Candelas; y sobre todo los bandoleros políticos no se cansan de robar al pueblo, los bandoleros más conocidos con una parte pequeña de lo que amasa un bandolero político se habrían retirado y estos de ahora si pudieran le robarían a su sepulturero.

Marcelo