La valla de Melilla LA VLLA DE MELILLA:MONUMENTO A LA INFAMIA. Tiene doce kilómetros de recorrido,seis metros de altura,es doble y en el medio lleva una alambrada con púas y ahora se han instalado alambres con cuchillas. La historia de la humanidad es deplorable:hombres libres y esclavos,siervos y señores,poseedores y desposeidos,neoliberales y afligidos. El neoliberalismo permite el libre flujo de capitales y el de los individuos que los gestionan, pero limita el movimiento de las personas,la reagrupación familiar y rechaza a los que huyen de las crisis humanitarias:denegación de auxilio,no reconoce el derecho de asilo y viola los derechos humanos. Las crisis humanitarias las provoca el neoliberalismo con las guerras de agresión,el intercambio desigual y la explotación: estas personas que sufren la violencia,el hambre y las enfermedades endémicas se ven abocadas a una emigración coercitiva y son rechazadas de la manera más repulsiva. Para hacer frente a las crisis humanitarias habría que poner un impuesto al capital especulativo transnacional de ayuda a los ciudadanos como propone Attac. Cerrarles el paso en el Mediterráneo y el Atlántico es crear fosas comunes con los que perecen en el mar y los que llegan a Melilla se desangran al saltar la valla,en medio de estas condiciones más les valdría convertirse en pajaros en vez de ser humanos. No hay ningún problema en recibir a estas personas que quieren escapar al sufrimiento para encontrarse un tormento peor,nada más habría que instalar campamentos de ACNUR: -Que el país de llegada conceda el derecho de asilo a los que le sea reconocido. -Se respeten los derechos humanos de los que han llegado. -Se ofrezcan ayudas para el reasentamiento voluntario en el país de origen. No podemos tolerar que se trate de esta manera a nuestros semejantes, algún día nos llegará también a nosotros,no estamos tan lejos de que nos reduzcan a seres de especies inferiores,como ya les ocurre a los inmigrantes. Marcelo Rodríguez Santiago |