Arnaldo Otegi Primero arma la bronca en una pseudo-huelga y luego la bronquitis en un alarde de oportunidad. Ahora padece neumonía, no se sabe si atípica... Cogerá también la gripe del pollo, y más concretamente la del pollo-pera? La verdad, a mí me da una envidia cochina eso de poder ponerse enfermo cuando uno quiere. Y como yo, hay muchos españoles que quisieran evitar no ya la cárcel, que es un marrón que no pesa nosotros, sino el simple madrugón de los lunes, que también pesa lo suyo. Pero, claro, no se nos ocurre qué hacer para enfermar con decencia y ser de vez en cuando pacientes. O no somos pacientes para saber enfermar, que no es exactamente lo mismo. Ya sabéis que hay uno que lo intentó, pero al no ocurrírsele nada por su cuenta, fue al médico y le dijo:“Doctor: ¿yo qué padezco?” A lo que el médico le contestó: “Usted padece idiota”. El problema de Otegi es que lo próximo que puede coger es la colitis, pero ésa le va a pillar de camino hacia la Audiencia Nacional, con lo que la vista tendrá que ser de pie, probablemente, o resultará definitivamente chafada. Salud, Arnaldo, a ver si eres capaz de dar solución a ese “conflicto”, que ya huele que apesta. Mariano Estrada
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