Arrigorriaga - Vizcaya

ETA, EL COMIENZO DEL FIN.

Eduardo Puelles Garcia, inspector perteneciente a la brigada de información antiterrorista de la policía nacional, asesinado por ETA el 19 de junio de 2009, descanse en paz.

El final de ETA no se empezará a vislumbrar hasta que los complejos que invaden a la sociedad española y la impiden protegerse como es debido, desaparezcan por completo, el día en el que el pueblo español se de cuenta de una vez por todas de que no hay castigo alguno para el daño cometido con el actual código penal, que antepone la reinserción a la justicia, que no hay condena alguna en las actuales carceles que cuentan con piscina, biblioteca, o pabellones de futbol, el día en que la sociedad española se de cuenta de una vez por todas de que los mismos que acercan a estos individuos a Vascongadas para estar más cerca de sus familiares, los que negocian con ellos proporcionandoles una legitimidad que ni la ética, la moral, la razón, la historia ni la ley les otorgan, que hablan de ellos como hombres de paz, los mismos que cedieron las competencias en educación permitiendo y siendo cómplices de que a la juventud de determinadas regiones se les eduque en el odio enfermizo contra España, gracias a lo cual ETA contará con una cantera inagotable, él día que la sociedad española se de cuenta de que es imposible que esta clase política acabe con el problema, el día en que los españoles sientan cada asesinato cometido por estas ratas como un ataque frontal y decidido contra todos y cada uno de los que formamos esta Nación, ese día si podrá comenzar el principio del fin de ETA, mientras tanto que nadie se deje engañar, el camino que nos espera por recorrer es el mismo que en las últimas décadas: frente a las bombas manos blancas, frente a las viudas mástiles con banderas a media hasta, frente al daño irreparable a la persona y a la nación la reclusión en polideportivos de acceso restringido con objeto de reinserción, frente a la indignación instantánea el olvido del mañana.