Escogemos un número de tres cifras, que no sean iguales, por ejemplo 321. Invirtiendo el orden de las cifras restamos el número menor, es decir a 321 le restamos 123. El resultado de la operación es 198. Invertimos también esa cifra (891) y la sumamos a 198. El resultado (1.089) lo multiplicamos por 2 y veremos que el resultado es
(2.17
.
Puede realizarse esta prueba con el número que se desee, siempre que no sean tres cifras iguales o un capicúa, ya que la resta quedaría reducida a 0. Si el resultado de la primera resta es 99, al invertirlo se le debe añadir un 0 a la derecha
(99+990=1089).
Probadlo, es cierto, sale con cualquier número.
Mil besos o más