Nueva Villa de las Torres - Valladolid

Hola foreros, necesito que me echeis una mano.
Formo parte de la directiva de una Asociacion de Valladolid y el proximo dia 21 y 22 hemos fletado 2 autobuses para viajar a San Sebastian.
Estoy encargado de diseñar una ruta lo suficientemente atractiva y poco
convencional que haga que pasemos un par de dias fantasticos.
A pesar de nacer en un pueblo, que no se si conoceis llamado Lasarte,cercano a la capital, (la unica vez que he estado en este bello pueblo fue a consecuencia del fallecimiento de Pablo (el de la Morena))y sinceramente mi pleno desconocimiento de esa zona me hace abusar de vuestra confianza para pediros, que si habeis viajado por esa zona y conoceis algun lugar, pueblo, lago, etc... atractivo, a pesar de que no venga en las guias me lo indiqueis, seguro que me sirve de ayuda.
Os lo agradezco por anticipado.
Un abrazo.

¡Sorpresa Avateo!
Siempre he pensado que eras nacido en Renteria y concretamente en el barrio de (roteta) eso le he escuchado a tu hermano y a tu madre en alguna ocasion.
Yo he pasado alguna vez por San Sebastian y me parece una ciudad preciosa no comparable a Nueva Villa por supuesto.
Hernani tiene el museo de Chillida que esta a 1 km de lasarte ,pero es de obligada visita el monte igueldo en turismo mundial .Para comer en Orio en la playa o en el restaurante Cachiña el mejor pescado del mundo mundial.Casi comparable al del bigote negro en Cadiz ,¡preguntaselo a mirana que ha estado por alli.
No vas ha encontrar el pulpo de Pontevedra pero si buenas sardinas en Getaria.
Pide mas ayuda que yo no recuerdo mucho mas ya hace mucho tiempo que no viajo al norte.
Me tira mucho mas el calorcito sureño,Cadiz, etc..
Espero que te haya servido de ayuda
saludos

UFFFFFFFFFFFFFFFFF es que Cai es mucho Cai, pescadoa la roteña, cazón en adobo, huevas aliñás, en fin para que hablar de Cai.Yo paraba siempre en Jerez de la Frontera, porque allí se hacían los seminarios, pero cuando terminaban las clases recorría varios pueblos.
Tengo amigos en jerez y cuando ando baja de moral llamo, y me hago muuuuchas risas con ellos y su ceceo, su manera de ver la vida y su vitalidad.
Aunque hay otro rincón de España que me chifla, Asturias.La verdad es que mires por donde mires este país hay lugares preciosos por visitar y por descubrir.
BESINES

ESPERO QUE TE SIRVA DE ALGO.

La Iglesia de Santa María fue proyectada por los arquitectos Lizardi e Ibero a mediados del s. XVIII. En esta iglesia se encuentra la patrona de la ciudad; la Virgen del Coro que se halla en el altar mayor, en su camarín.
El trazado de la iglesia es de planta rectangular con remate semicircular, con el ábside empotrado en la sacristía.
Posee planta de salón dividida en tres naves por grandes pilares octogonales de gran fuerza e igual altura, dando al recinto interior un aspecto unitario. Las entradas se sitúan en la fachada lateral, estando la principal situada en el centro de la nave. Esta entrada queda enmarcada por una portada barroca y dos torres que dan frente a la calle Mayor, y que queda pareada con la fachada principal de la Catedral del Buen Pastor, creando de esta manera un eje, que será la generatriz del resto de calles del ensanche de San Sebastián.
Perpendicular a este eje se sitúa la calle 31 de Agosto y al final de la misma se ubica la Iglesia de San Vicente: iglesia de gran valor entre las de San Sebastián por ser la edificación más antigua de las existentes.
Edificada a principios del s. XVI en austero estilo gótico, consta de tres naves de diferente altura y bóvedas de crucería. En su exterior se observan vestigios del tipo edificatorio fortificado, dado el carácter de plaza militar que San Sebastián poseía.
Prácticamente situado en frente de San Vicente y al otro lado de la calle 31 de Agosto, acodado contra el monte Urgull se ubica el Museo de San Telmo, antiguo Convento Dominico, cuya primera traza se remonta a principios del s. XVI.
La planta de la Iglesia es de cruz latina, con un ensanche en la proximidad del presbiterio. Posee 48 m de longitud y 10 de ancho siendo su altura de 20 m. Se cubre con arcos ojivales, con bóvedas de crucería estrellada, con terceletes y ligaduras curvas.
El coro se sostiene en una bóveda por arista, apoyándose su parte posterior en un arco rebajado.
El claustro renacentista está adornado con bóvedas de crucería y arcos de medio punto profusamente decorados. Desde él se accede al resto de las dependencias del museo entre las que destaca la antigua Iglesia, ya descrita, hoy sala de recepciones decorada con frescos de José María Sert. El mismo cuenta con salas dedicadas a etnografía, antropología, arte y cultura vascas. Es de destacar así mismo una pinacoteca dedicada especialmente a pintores vascos.
Como espacio urbano más destacable de esta primera calle de San Sebastián, encontramos la Plaza de la Trinidad. Esta se encuentra entre 31 de Agosto y el Monte Urgull. Se trata de una de las últimas actuaciones en esta parte de la ciudad y se encuentra perfectamente integrada en su entorno.
…en lo alto del Monte Urgull
El llamado Castillo de Santa Cruz de La Mota, se dedica en la actualidad a parque público municipal.
Provenientes la mayor parte de sus zonas de los siglos XVI, XVII y XVIII, su origen de fortificación se remonta al s. XI.
Adquirido al Ejército en el año 1921 se procede a su reconstrucción unitaria en el año 1963.
Consta de diversos sectores, cada uno de ellos con un sentido estratégico de defensa bien definido. El Macho es la fortificación que ocupa el lugar del primitivo castillo del s. XI y donde se encuentra la capilla del Cristo de la Mota.
El Mirador, la batería de las Damas, la de Santa Clara, la del Huerto del Gobernador, etc., son otros puntos fortificados del castillo. Especial mención puede hacerse del Cementerio de los Ingleses, bucólico lugar situado al norte del Monte Urgull y donde se encuentran los panteones de los oficiales ingleses que lucharon con el ejército aliado en la Guerra de La Independencia.
La totalidad del monte, declarada zona peatonal, está recorrida por diversos caminos y sendas que ascienden hasta la gran figura del Sagrado Corazón que domina con sus vistas toda la ciudad.
Desde estos caminos se van percibiendo distintos rincones típicos de San Sebastián en diferentes secuencias, que dan al paseo un ambiente sorpresivo e interesante.
El museo, la capilla, los paseos y ante todo las privilegiadas vistas sobre Donostia, hacen del Monte Urgull un punto clave de atención.

Un poco antes de llegar al Peine del Viento y dejando la orilla del mar atrás, encontramos la Plaza del Funicular. Desde aquí parte el vetusto símil de tranvía oblicuo que nos lleva hasta el parque de atracciones del Monte Igeldo.
Centro de atracción y divertimento es, junto con la bahía, el foco de atención y la imagen de la ciudad.
El parque de atracciones que en su cima existe, es lugar de visita obligada para los visitantes que por primera vez llegan a Donostia.
Pero más importantes que el funicular o el parque, son las perspectivas que desde esta atalaya privilegiada se nos presentan de la ciudad.
En un primer plano de la bahía observamos la Isla de Santa Clara, como centro del arco de las playas. Esta pequeña isla con su cala al abrigo del mar y su espigón para atraque de las barcazas, que desde el puerto acercan en verano a miles de personas, no cuenta con más edificación que un faro, pequeño también como la isla, y unos cuantos establecimientos para atender a los visitantes.

El Palacio de Miramar, sobre el "Pico del Loro"
Este palacio denominado también Real Casa de Campo de Miramar y marca el punto de origen histórico de la ciudad, al situarse sobre la traza de la antigua iglesia de San Sebastián, primitivo origen urbano de la población donostiarra.
El primer asentamiento religioso en ese punto se remonta a la segunda mitad del s. XI. Lugar de descanso del peregrino en una ruta del Camino de Santiago, el monasterio que allí se ubicaba fue casa de Catalina de Erauso, la "Monja Alférez", conocida por sus correrías militares principalmente en América.
En el año 1836 el ejército carlista en uno de los ataques de hostigamiento a la ciudad destruyó la iglesia y el monasterio de San Sebastián El Antiguo. Después de la guerra la iglesia fue reconstruida, pero la comunidad de monjas dominicas que antes allí residían no volvieron a establecerse.
Como se ha indicado el Palacio de Miramar, mandado construir por la reina M. Cristina de Habsburgo Lorena, se sitúa sobre el denominado "Pico del Loro". El origen de este nombre reside en una capilla dedicada a la Virgen de Loreto, que se encontraba sobre el espigón rocoso que separa las dos playas. Esta lengua rocosa que se adentra en la bahía se denomina en euskara Loretopea, que quiere decir bajo Loreto. Perdido el recuerdo de la capilla y más aún el del significado del nombre, la etimología popular ha modificado sustancialmente la denominación de este pequeño reducto donostiarra.
Volviendo al palacio, el conjunto integrado por éste con su parque, diversos edificios, jardines y dependencias, ocupa una superficie aproximada de 34.000 m2 y se sitúa en un punto de inmejorables perspectivas separando Miraconcha del ensanche de Elizalde.
La edificación fue proyectada en 1888 por el arquitecto inglés Selden Woknum y dirigida por el arquitecto municipal José de Goikoa. Su estilo netamente inglés puede encuadrarse en un denominado "cottage Reina Ana".
La cubierta es de teja plana inglesa y la profusa utilización del ladrillo visto en los paramentos exteriores y zonas de refuerzos le confieren un indiscutible aspecto británico.
Al igual que en el resto de las edificaciones donostiarras de la época, aunque éstas posean una tendencia más afrancesada, existe un carácter ecléctico en la decoración exterior y en la molduración.
Como todas las edificaciones del conjunto, el parque pertenece actualmente al Ayuntamiento y está abierto a los paseantes y visitantes que quieran gozar de las vistas espléndidas de la bahía.
Este parque fue proyectado en un principio, al igual que la plaza de Gipuzkoa, por Pierre Ducasse y concluidas las obras en el año 1893.
La grandiosidad de este palacio de verano queda reflejada en los 5.600 m2 construidos que posee y en los nueve salones de más de 50 m2 que en él existen.
Siguiendo en esta dirección hacia el barrio de El Antiguo, por el límite de la ciudad entramos en el paseo y jardines de Ondarreta.
La Plaza del Tenis y el Peine del Viento. Obra constructiva entre arquitectónica y escultórica, fue proyectada por el arquitecto Peña Ganchegui y por el escultor Eduardo Chillida. Se trata de una composición plenamente integrada en el entorno y adecuada morfológicamente a la abrupta orografía de la costa guipuzcoana.
El conjunto está formado por una serie de gradas, plataformas y espacios de estar de granito rosado, volcados siempre hacia el mar, siendo éste el elemento unificador de la composición. Las plataformas crean sucesivos ambientes y perspectivas hasta llegar sorpresivamente al espacio escultural. El Peine del Viento.
Tres esculturas de hierro macizo cortel de diez a doce toneladas de peso, conforman el remate perfecto y preparan la transición desde la zona urbanizada a la abrupta costa cantábrica.
El paseo queda dividido en tres partes. La primera de ellas según se accede, es la antesala del resto. La diferencia de cotas que en ella se da, ayuda a percibir el cambio de carácter que al tramo final del paseo se le confiere.
La segunda parte consiste en una plataforma superior a la cual se accede por gradas, cuya vocación es de zona intermedia de tránsito y de estancia volcada hacia el mar.
En la parte final, escenario de las esculturas, existen unas perforaciones en el pavimento, las cuales, en los días de mar brava arrojan grandes chorros de agua hacia lo alto dando al lugar un carácter de hito entre lo natural y lo urbanizado. En días tranquilos, en los momentos de pleamar se escucha el respirar del mar al compás de las olas.