Alboraya - Valencia

VILA-REAL, MISLATA, BURJASSOT O LA VILA SON ALGUNOS DE ELLOS
41 municipios de más de 5.000 habitantes no han solicitado ni una sola vivienda protegida
La necesidad de liquidez lleva a los municipios a destinar los solares a la renta libre

La oferta de vivienda protegida sigue siendo todavía insuficiente en la Comunidad Valenciana. A fecha de 30 de abril de 2008, 41 municipios de más de 5.000 habitantes todavía no han solicitado ni una sola vivienda de protección pública (VPP) ni para venta, ni para alquiler. Así, los vecinos de localidades como Vila-real, Mislata, Burjassot, Xirivella o Manises están encontrando muchas dificultades para acceder a un inmueble protegido, ante la falta de VPP de nueva construcción.

Este diario ha tenido acceso al listado de los 150 municipios de más de 5.000 habitantes de la Comunidad Valenciana que han solicitado un total de 20.377 viviendas protegidas de nueva construcción. Sin embargo, la mayoría de estos inmuebles se concentran en localidades como Valencia, Alicante, Elche, Castellón o Paterna, mientras que 41 municipios aún no han destinado suelo para VPP.

En la provincia de Valencia, los municipios que todavía no tienen ni una sola vivienda protegida en cartera son Mislata, Burjassot, Xirivella, Manises, Alfafar, Alboraia, Bétera, Riba-roja de Túria, L'Eliana, Benetússer, La Pobla de Vallbona, Benifaió, Godella, Chiva, Picanya, Meliana, Tavernes Blanques, Sedaví, Massanassa, El Puig, Vilamarxant, Rocafort, La Pobla de Farnals y Xeraco.

En Alicante, esta situación se produce en La Vila Joiosa, L'Alfàs del Pi, Cocentaina, Benissa, Rojales, Teulada, Xixona, Callosa d'En Sarrià, La Nucia, Dolores, Pedreguer, Catral, Bigastro y Gata de Gorgos. Los ayuntamientos castellonenses sin previsión de VPP son Vila-real, Alcalà de Xivert y Betxí.

La mayoría de estas localidades han chocado con un problema de liquidez económica que obliga a los consistorios a llenar las arcas municipales con los medios a su alcance.

Del 'boom' al pinchazo inmobiliario
En los últimos años, aprovechando el 'boom' inmobiliario, una de las principales fuentes de financiación de los ayuntamientos ha sido, precisamente, la venta de suelo municipal, pero la mayoría se ha derivado hacia la renta libre, ya que el beneficio económico es mucho mayor.

El pinchazo de la burbuja inmobiliaria también juega en contra de la vivienda protegida. En tiempos de crisis, son pocos los promotores que se embarcan en este tipo de obras, por lo que los ayuntamientos tampoco sacan solares para VPP con facilidad.

De hecho, además de los 41 municipios que no han solicitado VPP en los últimos años, hay varias decenas de ayuntamientos cuyas peticiones de vivienda protegida son muy escasas. Por ejemplo, dos bastiones del hiperdesarrollo urbanístico en Alicante como Benidorm y Torrevieja tan sólo han pedido 82 y 40 VPP, respectivamente, en régimen de alquiler.

La lista de municipios con un nivel bajo de actividad también es larga: Benicarló (12), Calpe (15), Mutxamel (6), Pego (23), Benaguasil (32), Castelló de la Ribera (13), Almàssera (17)... Esta situación afecta especialmente a colectivos como los jóvenes o los inmigrantes.

https://ww.elmundo.es/elmundo/2008/06/01/valencia/1212310192.html