copiado de otro foro por lo que me ha gustado os dejo esto tal cual para que sigamos viendo la manera de actuar desde el cinismo de algunos personajes del pp que reclaman justicia electoral cuando son los primeros que la deniegan LA VORACIDAD DE LA FALACIA La creencia en los valores fundamentales de la vida tiene que empezar por los de uno mismo. El reproche, hacía las actuaciones de los demás, no puede pasar por la falacia e indignidad de nuestros actos. Cuando vemos en la prensa que un señor como el secretario de acción parlamentaria del PP en Castilla la Mancha, D. Leandro Esteban, tacha de tramposa una ley electoral, haciendo referencia a las normas sacadas al respecto por parte del Gobierno de la Junta, me parece indigno y pero aun, un ataque a todas esas personas que durante años llevamos luchando por una ley electoral justa, transparente y democrática, donde los derechos fundamentales de igualdad, libertad y justicia no se vean atacados de manera tan vil por la ambición de poder de los dos grandes partidos nacionales. No habría que rasgarse tanto las vestiduras para hablar de la desigualdad de los castellano manchegos, puesto que miles y miles de ellos llevamos años sufriendo en nuestras carnes la injusticia que se comete hacia nosotros, viendo como nuestros votos van dirigidos a un partido el cual no los recibe ya que el portador final de los mismos son los escaños del PP o del PSOE. El señor Esteban habla de salir a explicar a los castellano manchegos, por parte del Presidente de la Junta, la denuncia que él formula, pero sin embargo ningún miembro de estos dos partidos da la cara para explicarnos porque engullen nuestros votos, de manera tan voraz, cuando van dirigidos a un partido diferente, en este caso I.U.. Este divorcio no se ve reflejado a nivel nacional ni siquiera a nivel autonómico, porque en el transcurrir del tiempo solo hemos visto el gran matrimonio PP-PSOE y el regalo mutuo que se hacen estas dos formaciones políticas el día de los enamorados y que no es otro que el ataque a la justicia, a la dignidad, a la igualdad y a una verdadera y transparente democracia cuyo nombre es LEY ELECTORAL, aunque todo ello y como no podía ser de otra forma bajo el marco de la legalidad. Cuando a este señor y a otros tantos se les llene la boca con la palabra democracia, que piensen antes que ésta debe pasar por la igualdad de todos y todas y no que se vea empañada por las normas hechas "de los que presumen de lo que carecen". |