Yuncos - Toledo

El dispositivo policial suspendió ayer de forma provisional las labores de búsqueda de Marta del Castillo en el vertedero de Alcalá de Guadaíra (Sevilla), una vez que no se ha encontrado ningún rastro de la menor en los 40 días de rastreo, según informó el padre de la joven, Antonio del Castillo. Los técnicos tendrán que elaborar ahora un informe para que sea el juez que ordenó la búsqueda quien decida si se retoman las tareas o se suspenden definitivamente.
La búsqueda se inició en este lugar tras la declaración del principal implicado en la desaparición de la joven sevillana, Miguel Carcaño, que, tras mantener durante semanas que se deshicieron de la joven en el río, cambió su versión y dijo que la arrojaron a un contenedor de basuras cercano a su vivienda en el barrio de la Macarena tras abusar de ella y matarla, actos que realizó en compañía del menor conocido como 'El Cuco'.
Posteriormente, Carcaño se ha reafirmado en esta versión en una carta -escrita tras su supuesto intento de suicidio- y en su última comparecencia ante el juez instructor, aunque en esta ocasión no prestó declaración.
Cuatro personas permanecen en prisión por la desaparición de Marta el pasado 24 de enero: el propio Carcaño, quien inicialmente se confesó autor de su muerte, su hermano Javier Delgado, a quien la Policía apunta como encubridor, y sus amigos Samuel Benítez y Javier G., menor de edad.
El padre de la chica, Antonio del Castillo, justificó la suspensión al no haber localizado «nada» relativo a la joven o sus presuntos asesinos. Según indicó, se trata de una decisión que «se veía venir» porque pasaban los días y no se encontraba ninguna pista en el vertedero, un lugar del que él siempre ha sospechado que no albergaba el cuerpo de la menor.
Del Castillo lamentó «el daño innecesario» que están pasando, y se mostró contrariado de que la búsqueda queda ahora en manos de «esos cuatro delincuentes en prisión que saben dónde está el cadáver». Por ello instó al juez instructor a que vuelva a citar a «estos personajes» -en referencia a los implicados- para tomarles declaración y determinar el lugar en el que puede estar Marta.
«Estamos en manos de estos delincuentes», criticó el progenitor, quien volvió a insistir en que «tiene que haber mecanismos para hacerles confesar la verdad».
«La primera versión fue cierta en cuanto a los hechos que ocurrieron, no respecto al lugar donde arrojaron el cuerpo», apostilló, para subrayar a continuación el «desamparo legal» en que se encuentra.