Bruselas propone castigos penales Bruselas propone castigos penales para los «lobos» de los mercados La CE plantea introducir más transparencia en el sistema financiero MARIBEL NÚÑEZ / CORRESPONSAL EN BRUSELAS Día 09/12/2010 comentarios El camino parece interminable pero las buenas palabras que suelen salir de las reuniones que el G-20 ha celebrado desde que estalló la crisis en 2008 parece que se pueden empezar a concretar. En el caso de Europa el comisario europeo de Mercado Interior, Michel Barnier, presentó ayer dos propuestas para reformar las reglas de los mercados financieros que rigen en Europa, reglas que no son comunes en todos los países y que, además en muchos casos no se respetan, lo que se ha comprobado con la crisis financiera. Barnier asegura que las normas europeas sobre los mercados financieros establecen, por ejemplo, una serie de sanciones que divergen en aspectos esenciales como los tipos de sanciones posibles y la cuantía de las multas dependiendo del país de que se trate, de tal modo que las sociedades de inversión no dudarán en buscar aquel país europeo más benévolo en cuanto a normativa se refiere a la hora de instalarse. Por ello, continuaba ayer Barnier, estas actuaciones menoscaban la protección de los consumidores, la integridad del mercado y la confianza en el sector financiero. Así Bruselas propone una convergencia europea en materia de sanciones, sin excluir las penales además de las civiles, así como elevarlas para que sean lo suficientemente disuasorias y que éstas puedan recaer tanto en los organismos financieros como en los individuos responsables de las infracciones. Este aumento de las sanciones se está negociando también a nivel mundial, en el seno de las reuniones del mencionado G-20, del que salen acuerdos y marcos generales que luego cada país o bloque de países, como es el caso europeo, tiene que implementar y adaptar a su normativa. La idea de fondo es armonizar en la medida de lo posible la normativa del sector financiero a nivel mundial, así como la tifipicación de las infracciones y las correspondientes sanciones, para evitar que haya fuga de inversores del tipo «lobo» depredador que mencionó hace unos meses el ministro sueco de Economía, en referencia a los ataques que estaban sufriendo los mercados de deuda soberana europea. Además la Comisión planteó ayer la revisión de la Directiva sobre los Mercados e Instrumentos Financieros (MIDIF), en vigor desde 2007, y que permite a las sociedades de inversión operar libremente en toda la Unión Europea. La cuestión es que desde 2007 los avances tecnológicos, la complejidad y la volatilidad de los mercados financieros, así como las lecciones aprendidas de la crisis, han puesto de manifiesto que la mencionada Directiva puede ser manifiestamente mejorable. La idea del comisario es que la reforma de esta importante Directiva pase por aumentar la transparencia de los mercados, una mayor eficacia de éstos y, sobre todo, aumente la protección de los inversores. Entre los aspectos que no regula la Directiva MIDIF, por ejemplo, es el de los algoritmos de las negociaciones (high-frequency trading en inglés) en los que están basados algunos de los productos de inversión actuales, por lo que es urgente su reforma, según Bruselas. Y para vigilar que todo lo anterior se lleve efectivamente a la práctica el nuevo regulador de valores mobiliarios (ESMA en su acrónimo en inglés) se encargará de aumentar el control de los mercados a partir de enero. |