Villasequilla - Toledo

El desfile militar de esta mañana en Madrid ha dejado situaciones curiosas más allá de los abucheos al presidente, José Luis Rodriguez Zapatero. La tribuna de autoridades ha sido testigo de la tensión y los roces entre varios de los asistentes, en especial entre Miguel Ángel Revilla, presidente de Cantabria, y su homóloga madrileña, Esperanza Aguirre.
Precisamente han sido los abucheos del público a Zapatero los que han desatado las tensiones entre Aguirre y Revilla. Durante el himno la gente seguía silbando a Zapatero, y el presidente de Cantabria ha expresado su disconformidad tachando el gesto de falta de respeto. La reacción da Aguirre no se ha hecho esperar y ha contestado con un "lo siento Sr. Revilla, esto es la libertad de expresión, en Madrid la hay".

En declaraciones a la cadena SER, Revilla ha explicado que cuando él se ha bajado a saludar a los Reyes, al besamanos, su mujer, Aurora Díaz, se ha quedado sentada en la tribuna.

En ese momento el consejero de transportes de la Comunidad de Madrid, José Ignacio Echeverría, sentado justo detrás del presidente de Cantabria y de la esposa de éste, ha comentado en voz alta: "hay que ver qué país que uno se hace famoso por un taxi y unas anchoas", haciendo alusión a la gracia que hace siempre Revilla cuando viaja en taxi a la Moncloa y lleva unas anchoas.

Tras escuchar este comentario, Aurora Díaz ha contestado a Echeverría con un "Mi marido es famoso por honrado y buen gestor, así que cierre la boca".

¡Qué nivel!

Y si no, agárrate a lo de Venezuela, que se les ha indispuesto el abanderado una hora antes del desfile dicen y, claro, no había nadie capaz de portar su bandera. Este es el más puro estilo del gorilón venezolano: no me gusta lo que dices, pues te la guardo y te la devuelvo a la primera de cambio.

Estamos perdiendo las formas y los valores. Pero cuando no se hace política de Estado es lo que podemos esperar.