A precio de saldo Conducir un Audi A8, por poner un ejemplo entre las berlinas de representación, es un deseo casi irresistible para cualquier aficionado al automovilismo que se precie. Hoy, comprar uno de estos vehículos queda más accesible que nunca: sobran coches oficiales en España y su salida de la Administración se está realizando, a marchas forzadas, a precio de saldo. Subasta tras subasta: el último gobierno autonómico en decidir la venta al mejor postor de buena parte de sus coches oficiales ha sido el de Aragón, pero antes lo han hecho otros como el de la Generalitat Valenciana, con el objetivo de "controlar su gasto". 42 vehículos fueron los ofrecidos en la licitación valenciana, por los cuales se obtuvo finalmente la modesta cantidad de 85.000 euros. 85000€ por 42 coches. A 2023 euros por coche, y seguro que muchos los compraron por más de esos 85.000 cada uno. Me pregunto quién se lo habrá llevado en la subasta, supongo que algún primo de los mandatarios |