Villarrubia de Santiago - Toledo

La estación de alegría y color estaba dando paso a otro momento... El agradecimiento por las cosechas recibidas, el olor de la tierra acariciada ya por un pequeño rocío matinal, el color dorado de los cielos que abrazaban esta tierra adornaba ya unos bellos atardeceres en los que cualquiera podía adentrarse en la ensoñación de otros mundos, de otras realidades... El Otoño anunciaba su presencia.

Y en el otoño..........las setas. Las habia de todos los colores: blancas, grises, amarillentas, rojas ... y de todos los tamaños: grandess, pequeñas, diminutas . En los largos paseos entre las alamedas siguiendo el curso de los arroyos y a su vera, impregnadas por la humedad matinal de los rocios y a la sombra del sol del mediodia en ese submundo diminuto entre las hojarascas y mimetizadas con los colores de las hojas moribundas,asomaban sus sombreros carnosos, una vez solitarias otras haciendo hileras, corros o describiendo extrañas figuras sobre el manto de hojas por encima del suelo.
Era en estos parajes donde gustaba al final de las tardes de otoño buscar nomos, duendes, hadas y otros personajes con que alegrar mis dias.........