Torrijos - Toledo

Los dardos a Mariano Rajoy le llegan desde todos los puntos. Salvo los más fieles, La Razón –marianista por antonomasia- y ABC, que aún le echa un capote, la mayoría de los medios de comunicación ponen al presidente del Gobierno en cuarentena. Este domingo, Pedro J. Ramírez, le da un zarandeo del que difícilmente podrá recuperarse, y es que le ve ya ‘cadáver político’. El director de El Mundo cree que el plazo máximo que debe tener el líder popular es hasta fin de año y si no cambia la situación económica, paro incluido, debe irse.

En su columna de hoy, Pedro J. Ramírez critica que el Gobierno no realice un ejercicio de "reflexión" sobre la encrucijada en la que se encuentra y se mantenga brazos caídos. "Ningún miembro del Gobierno o dirigente del PP tras el bochornoso Consejo de Ministros del viernes ha dicho que tenemos que reflexionar desde el primero hasta el último".

"Acercarse a la mitad de la legislatura con más de seis millones de parados, un déficit del 7% sin contar los casi 4 puntos de la ayuda a la banca, una deuda galopante y enlodados en la recesión es todavía peor que perder por 8-1 en los partidos de ida. Como para encima bajar los brazos (…) El examen todavía no ha concluido pero las primeras pruebas las ha hecho rematadamente mal y si él mismo se suspende al final de la legislatura, pronosticando que dejará más paro que el que encontró, pues apaga y vámonos", escribe el director de El Mundo.

Ramírez da a Rajoy de plazo hasta fin de año. Si no se produce mejoría, "habrá que entrar en la siguiente fase, que consiste en pedirle que se vaya" y advierte de que es muy posible que el presidente anteponga sus intereses propios a los de la mayoría. "Si tampoco esto funciona, no quedará otra que esperar al vencimiento del contrato con la firme determinación de no renovárselo en ningún caso por mucho que bajen sus pretensiones (…) El problema es que mientras en un equipo galáctico si te falla un crack tienes a otros, cuando el que no da la talla en un gobierno es el presidente, de poco sirve tener buenos ministros".

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