El Registro de la Propiedad rechaza el Polígono Villa de Sonseca Uno de los problemas más graves que afronta un municipio de tradición industrial como Sonseca es la falta de suelo para empresas. Mientras se espera a que resucite el proyecto de crear un polígono mancomunado con la vecina Orgaz, el Ayuntamiento de la Villa del Mueble recibía recientemente una pésima noticia: la paralización del polígono Villa de Sonseca. El Registro de la Propiedad no ha aceptado la inscripción del proyecto de reparcelación de este área industrial situada junto a la carretera de Mazarambroz. Esto supone, en la práctica, la paralización del proyecto al no ser posible la compraventa de unas parcelas no escrituradas. El alcalde sonsecano, Francisco José García Galán, afirma que uno de los motivos por los que el Registro ha devuelto el proyecto fue la venta directa de terrenos a los propietarios de la zona que en su día tuvieron que ceder parte de sus fincas con la tramitación urbanística del polígono. El alcalde socialista recuerda que aquella tramitación fue obra de su antecesor, José Millán Álvarez (PP), y en ella se fijaban tanto las cesiones obligatorias como la posterior reventa del terreno que precisaran los industriales ya enclavados en el lugar para que siguieran operativas sus empresas. Sin embargo, García Galán señala que el Registro de la Propiedad ha entendido esto como contrario a la normativa urbanística, ya que estos terrenos sólo pueden venderse en pública subasta. A pesar de esto, el alcalde afirma que seguirá adelante con el Villa de Sonseca. Pero aclara que lo hace porque ya está prácticamente terminado y su cancelación supondría pagar «una millonada» en compensaciones a su constructora. Sigue considerando la forma en que el antiguo equipo de Gobierno preparó este polígono como un error en el que «Sonseca pagará, durante muchos años, las consecuencias». A bote pronto, el Consistorio tiene previsto cumplir las exigencias del Registro convocando la subasta. Para informar de esta cuestión y otros aspectos del proyecto, tiene previsto celebrar una reunión con los propietarios del polígono el próximo miércoles. «un gran desaguisado». El alcalde mantiene que la no inscripción del polígono en el Registro «es una pequeña parte del gran desaguisado que realizó el anterior equipo de Gobierno del PP» con este tema. Así, expresa su preocupación por los empresarios de la zona, que quedaron obligados a pagar las obras y cuyos costes pueden incrementarse con la subasta. Tampoco queda en buena situación el Ayuntamiento, ya comprometido por las deudas. García Galán recuerda que el anterior equipo de Gobierno consiguió un crédito bancario con el que adelantar el pago de las obras, para que a su vez los propietarios las abonaran en un plazo de cinco años. Sin embargo, el alcalde estima que este crédito -del que se derivaron 300.000 euros a otros fines- sólo aportará 1,8 millones, mientras el coste de urbanizar el polígono pasó de los dos millones inicialmente presupuestados por el PP a 3,2, que el actual equipo de Gobierno logró reducir a 2,8 millones. Aún así, queda un desfase de un millón que lleva García Galán a preguntarse «de dónde sacaremos el dinero». Y concreta que la pregunta la hace tanto por el Ayuntamiento como por los empresarios afectados, que ya deben soportar la crisis. Tras este nuevo problema, el alcalde reitera sus críticas al PP por sacar este proyecto adelante antes de las pasadas elecciones teniendo en frente al resto de partidos y a los propios dueños, algunos de los cuales tienen que afrontar costes de hasta 300.000 euros. Acusa al anterior gobierno de facilitar «costes ficticios, muy inferiores a los reales». Cita como ejemplos que el gasto en iluminación del polígono se estimó en 609.000 euros, cuando terminó costando 1,3 millones. También acusa a su antecesor de firmar documentos nulos con la cantidad a pagar por cada propietario «porque aún no se sabía el coste real del polígono» y se les garantizaba una ayuda aunque no se les aseguraba cómo se les pagaría y, lo más importante, de dónde saldría ese dinero. El exalcalde recuerda que el proyecto fue visado por técnicos locales y de la Junta. Tras conocer el anuncio de García Galán de la devolución por el Registro del proyecto de reparcelación del Polígono Villa de Sonseca, el exalcalde José Millán Álvarez consideraba que era un contratiempo subsanable y urgía al PSOE a moverse para ello por la necesidad que tiene Sonseca de suelo industrial. El ahora portavoz municipal del PP recuerda que el proyecto elaborado por su equipo contó en su día con la aprobación de los técnicos de Urbanismo del Ayuntamiento sonsecano y de la propia Junta, por lo que presume que lo ocurrido se reduce a «una diferencia de interpretación del registrador» sobre la ley urbanística regional, la Lotau. El exregidor defiende la vigencia de los convenios urbanísticos que en su día firmó con la gran mayoría de propietarios de fincas en el futuro polígono. Estos convenios, que incluían la reventa sin subasta a los propietarios de parte de los terrenos que cedían para el desarrollo del área industrial, porque los precisaban para sus empresas, fueron preparados por los técnicos municipales de Urbanismo de Sonseca. «Los mismos que hay ahora», apuntilla Álvarez. El exalcalde añade que los funcionarios de Urbanismo de la Junta dieron después su visto bueno a los convenios urbanísticos y el procedimiento seguido para su elaboración. Por otra parte, el exalcalde ha negado las acusaciones lanzadas por el actual equipo de Gobierno de que el Polígono costará más de lo previsto por el PP. Así, recuerda que la obra de urbanización fue adjudicada con un coste menor en un 20 por ciento de su presupuesto inicial. Avisa que en su grupo «vigilaremos para que el coste del polígono no se incremente en demasía» respecto a sus estimaciones, por lo que exigirán explicaciones al actual Gobierno local si esto ocurre. Álvarez ha lamentado que el PSOE haya parado el desarrollo del polígono «casi un año» y le pide que lo agilice. «Si hay que hacer modificaciones, se hacen», zanja repitiendo que su partido planteó una solución al problema de suelo industrial que ha atenazado a Sonseca en los últimos tiempos. |