Sonseca - Toledo

(...) Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones.
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En mis tiempos de estudiante joven aprendí que existe una teoría, la de la deconstrucción, por la cuál podemos afirmar que cualquier texto carece de un significado absoluto. Que cualquier texto significa según qué momento y qué estado de ánimo de según qué lector lo sobe. El caso de la Educación para la Ciudadanía es uno ya demasiado manido. Por los unos por defender su implementación, por los otros porque arremeten contra ella a manera del exorcista. La mentes pecaminosas temen los gobiernos dasasidos de los otrora meros símbolos de fé.

Lo que está ocurriendo en la Comunidad Autónoma de Madrid, y es un ejemplo, va más allá de la deconstrucción. Se pasan por la sotana, o los mocasines Prada, el que estemos en un pais laico. Aguirre firma un convenio con el Arzobispado de Madrid para que en los Comités Asistenciales de Etica y de los Equipos Multidisciplinares de Cuidados Paliativos hagan corro también los sacerdotes católicos. ¿Laico? My ass! (aunque no deje de ser una grosería, hay groserías que suenan mejor en inglés.) Le van a poner “peros” a la eutanasia hasta que las ranas echen pelo.

De Prada, en un escrito más propio de púlpito de iglesia que de prensa diária, se cree sin duda con un buen par de bemoles por meter baza de esta guisa peyorativa: “estamos en una democracia que te cagas.” Lo peor es que según él, el gobierno ó la iglesia (a ser possible los dos como uno sólo) es quien tiene que darnos permiso para cagar. Faltaría más.

Aún nos falta mucho más.

Se me antoja que le agotamos el significado a “laico” de tanto usarlo. Como en la canción. Se le emborronó el matiz acaso y se quedó de comodín para el juego de poker de a dos. Rouco se apropió la banca y reparte mano. ¿Vas ó pasas?

¿Qué se espera de una sociedad que se empecina en ponerles un tapón al grifo analítico de nuestros chavales? Ahora resulta que lo que se persigue en las aulas es inculcar al muchacho un calco milimétrico de las ideas de los padres. Cuando sin ser un lumbreras, cualquier educador hecho y derecho reconoce que el acercamiento más lógico es darles a los chavales los medios apropiados para que lleguen a las conclusiones por ellos mismos. Que en muchos de los casos difiere en 180 grados de la opinión del educador, en primer lugar.

Por si se lo preguntan, toda esta diatriba me viene de lo del Tribunal Superior de Justicia en Andalucía, que anuló varias referencias de la asignatura EpC sobre ideología de género (homosexuales)y opciones vitales.

Partiendo de que en casa a uno le educacan como mejor se puede, la tarea además en las aulas es de hacer llegar a los jóvenes los medios necesarios para en un futuro ser capaces de pensar críticamente por sí mismos. Esta es la característica de un ser maduro, pleno, "redondo" como dicen los de literatura.

Se les está haciendo un desfavor a nuestros muchachos cuando sólo les inculcamos una forma de vivir. Sin darles zapatos buenos para que también anden por andurriales. Así pasa, cuando les llega la hora de tomar al toro por los cuernos (perdón por la metáfora) unos se aturden y revierten a la violencia intolerante, otros optan por esconder sus preferencias sexuales, y afortunadamente otros se abren camino no sin alg'un que otro descalabro por esta sociedad plural que pide a gritos que se le abran todos los caminos del derecho indivual y los deberes para con el prógimo. No hay mejor manera de predicar que con el ejemplo.