Sonseca - Toledo

Desarticulada una red que había cometido 23 robos en la provincia
Una sustracción en Mondéjar permitió iniciar una operación que ha posibilitado la detención de 19 personas cuya cobertura delictiva alcanza a diez provincias y cinco comunidades
Cristina García
La Guardia Civil de Guadalajara ha desarticulado una organización dedicada al robo que está relacionada con 68 delitos (por el momento esclarecidos) en diez provincias españolas, entre ellas Toledo, y cinco comunidades autónomas. En el marco de la denominada ‘Operación Rombo’, se han detenido, a día de hoy, a 19 personas, nueve de las cuales han ingresado ya en la cárcel de Alcalá-Meco. Se les acusa de delitos contra el patrimonio, robo con fuerza en las cosas, hurto de vehículos a motor, falsificación de documentos, receptación y asociación ilícita. En las primeras diligencias aparecen 23 delitos cometidos en la provincia de Toledo, nueve en Cáceres y Madrid, siete en Ciudad Real, cuatro en Albacete, dos en Guadalajara y uno en las provincias de Valencia, Córdoba, Cuenca y Jaén. Sin embargo, en las últimas horas se han esclarecido otros 11 robos relacionados con la operación, lo que haría 68 los delitos esclarecidos.
Los detenidos residían en municipios de la provincia de Toledo, Cuenca y Madrid y todos, a excepción de una mujer, eran de nacionalidad rumana. Así, el 9 de enero fueron detenidos diez hombres y una fémina: GJ, de 32 años, con domicilio en Tembleque (Toledo); MH, de 27 años y MC, de 24, (Sonseca, Toledo); SH, de 32 años y ANJ de 26 (La Guardia, Toledo); IB, de 21 años, con domicilio en Corral de Almaguer (Toledo); VGP, de 20 años, VS de 27 y NCU de 21 con domicilio en Lillo (Toledo); SH, de 23 años, con domicilio en Orgaz (Toledo) y EMRD, mujer de 23 años, residente en Tembleque (Toledo).
Tras ello, la Comandancia de Guadalajara detuvo el 20 a otros seis componentes de la banda, todos ellos varones: IO, de 24 años, SAD de 26 y VC de 32 con domicilio en Sonseca (Toledo); IGR de 26 años, con domicilio en Lillo (Toledo); FCS, de 30 años, con domicilio en Yepes (Toledo); y DJ, de 33 años, de La Guardia (Toledo). El 21 de enero fue localizado y detenido en Tarancón (Cuenca) GS, de 31 años y el 22 de enero, la Guardia Civil arrestaba en Guadalajara a IC, de 30 años domiciliado en Madrid.
Las investigaciones comenzaron en agosto del año pasado por parte del grupo de Patrimonio de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Guadalajara que, además, ha contado con la colaboración de la Guardia Civil en Toledo y las patrullas de los puestos de los municipios afectados. En concreto, fue un robo cometido en un taller de Mondéjar, el día 13 del mencionado mes, lo que motivó la intervención de los agentes. En dicho suceso, se sustrajeron varios efectos como material informático, dinero en efectivo, una furgoneta o un quad. A partir de ahí se inició un trabajo policial que se ha prolongado durante cinco meses y en el que se ha puesto de manifiesto «la perseverancia y profesionalidad de la Guardia Civil sin levantar las sospechas del grupo que estaba siendo investigado», concretó ayer el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Máximo Díaz-Cano, quien subrayó que, aunque hay 19 detenidos, se estima que más de 20 personas pudieron participar en la comisión de los delitos, no descartándose, por tanto, nuevas detenciones.
Un grupo «difícil de seguir» dado que se estructuraba en pequeñas células que se trasladaban a localidades distintas, dificultando su seguimiento. Según su ‘modus operandi’, una vez se desplazaban a los distintos lugares, seleccionados previamente, establecían un sistema de vigilancia para prevenir la presencia policial. Contaban con todo tipo de materiales para acceder a los recintos y, tras los robos, algunos los ocultaban en lugares próximos, estableciendo un sistema de vehículos lanzadera para avisar, en caso de peligro. Además de su organización, había un jefe que repartía las intervenciones y mantenía igualmente contacto con las personas que adquirían los objetos sustraídos.
Las primeras estimaciones cifran el material incautado durante los diferentes registros por encima de los 500.000 euros. Entre los objetos hallados tras los diferentes robos (realizados en viviendas o establecimientos comerciales) se encuentra material informático, de imagen y sonido, telefónico, fotográfico, herramienta variada, joyas, gafas, prismáticos, llantas de automóvil, bicicletas de montaña, cazadoras de piel, perfumes, licores, dos rifles de calibre 300, dos revólveres, dos carabinas de aire comprimido, una bomba de extracción de gasoil, tapas de arquetas, tubos de cobre, seis vehículos quad, una motocicleta, una máquina helicóptero para el alisado de cemento en superficies, una maquina de proyectar yeso, máquinas de limpieza de automóviles, diversos aparatos de aire acondicionado, navegadores y varios miles de euros en efectivo.
Al margen de Mondéjar, punto clave de la investigación, el segundo robo cometido por esta red en Guadalajara fue en Albalate de Zorita, en el interior de una parcela de la urbanización ‘Nueva Sierra’.