Chaqueteros A día de hoy se reconoce, al menos de modo formal, el derecho a tener ideas,unos de derechas, otros de izquierdas y otros, los menos,al Sol que más calienta. Pero lo que no se reconoce fácticamente es el derecho a cambiarlas. Cambiar de ideas, y no digamos ya de partido, es algo muy mal visto y severamente castigado por la ley no escrita. Todo aquel que da un paso en ese sentido,pierde amigos, dinero, respeto y hasta acaba por desvanecerse en el limbo del olvido. Puede uno recordar casos buenos y casos malos, casos de personas que pasaron de una posición justa a otra injusta, y viceversa, pero, se trate de Jorge Verstrynge, de Gotzone Mora, de Rosa Díez o de Herrero de Miñón, el proceso acaba por ser más o menos el mismo. Es insultado por "chaquetero", palabro deleznable que se aplica a todos aquellos que, empezando por Adolfo Suárez, hicieron de la España de Franco un país democrático. Y hay casos en los que también para bien y para mal, se juzga a los hijos por los hechos de los padres, y aquí no quiero hacer nombres ,todos los lectores tienen alguno presente. Cuando un político evoluciona o involuciona cambiando de ideas le colocamos la etiqueta de chaquetero.Nadie se acuerda de un San Pablo anterior a la caída del caballo y otro posterior. Arrepentidos los quiere el Señor. |