La envidia y no la endibia como algunos confunden.
LA ENVIDIA SE OCULTA
"Nadie se atreve a decir que envidia a otro".Juan-Luis Vives
" Quien tiene envidia pone gran trabajo en impedir que se manifieste esa llaga interior". Juan-Luis Vives
Una de las peculiaridades de la actuación envidiosa es que necesariamente se disfraza o se oculta, y no solo ante terceros, sino también ante sí mismo. La forma de ocultación más usual es la negación: se niega ante los demás y ante uno mismo sentir envidia.
Se es envidioso pero se ha de interactuar como si no se fuera. Las razones por las que la envidia se oculta (se niega) son de dos órdenes: psicológico y socio-moral
Razones psicológicas
Razones psicológicas: la envidia revela una deficiencia de la persona.
Es esta deficiencia la que el envidioso no está dispuesto a admitir. Es así como el sujeto que actúa como envidioso ha de sobre-actuar como no siéndolo.
¡No faltaba más! ¿Cómo voy a sentir envidia de él(ella) , si éste no merece tan siquiera ser envidiado?.
Mas bien se dice que siente pena, o en todo caso , sino pena, el envidioso racionaliza para demostrar a los demás que el envidiado está donde no debe estar.
El envidioso "no puede ver" al envidiado, y no precisamente porque le sea meramente antipático. No puede literalmente verlo, porque la visión que de sí mismo obtinen por la presenecia del envidiado le es intolerable.
Razones sociomorales
Razones sociomorales: la motivación envidiosa es la que precede al discurso crítico y/o difamador.
Existen tres motivaciones ocultas:
1- Lo que oculta el envidioso en primer lugar es su posición inferior respecto al envidiado. De ningún modo se estará dispuesto a reconocer la superioridad del otro, manifestándose de una forma sofisticada (hipercriticismo) o más tosca (la difamación) .
2- Lo que oculta en segundo lugar es el propio sentimiento de envidia . La envidia presupone una serie de connotaciones morales negativas ( maldad, doblez, astucia, complicación psicológica...) que el envidioso sabe que caerían sobre él, si se evidenciara su aflicción. Por consiguiente la envidia se racionalizará muchas veces de forma que aparezca incluso como crítica generosa ( "digo todo esto por tu bien")
3- Y la tercera razón por la que se oculta , es porque de descubrirse y evidenciarse los demás notarían de inmediato la carencia del envidioso, que se hace visible en el bien que el envidiado posee.
Pero la envidia, pese a todos los esfuerzos acaba por emerger, sale a la superficie, porque la envidia es una pasión, y, como tal, controlable sólo hasta cierto puento.
No existen mecanismos eficaces para ocultar satisfactoriamente la envidia.
Una evidencia es: la obsesiva ocupación como tema por la persona del envidiado y eso es de por sí altamente significativo. Otras veces el indicio puede ser su silencio, mientras los demás elogian al envidiado.
Otras veces manifiesta un silencio activo, un callar para no decir, hasta que al fin se pronuncie socavando las bases sobre las que otros sustentaron su admiración. El envidioso no ofrece, generalmente, descaradamente su opinión negativa; mas bien tiende a invalidar las positividades del envidiado.
El efecto que pretende con el discurso envidioso es degradar la posición social, la imagen, de que goza el envidiado.
El envidioso acude para el ataque a aspectos dificilmente comprobables de la privacidad del envidiado, que contribuirían , de aceptarse, a decrecer la positiva imagen que los demás tienen de él (el envidioso pretende hacerse pasar por el mejor "informado" , advirtiendo a veces que "aún sabe más"). pero a donde realmente dirige el envidioso sus intentos de demolición es a la imagen que los demás, menos informados que él, o más ingenuos, se han construido sobre bases equivocadas. ¿Cómo conseguirlo

mediante la difamación.
"La Envidia es una aflicción vergonzosa que procuramos disimular con cuidado porque nos desagrada y humilla anuestros propios ojos" - Alibert