Novés - Toledo

BERMEJO OBSESIONADO POR EL PP -ABC DE 22 DE FEBRERO DE 2009
Domingo, 22 de Febrero de 2009
Obsesionado con el PP
CRISTINA DE LA HOZ | MADRID
«Ya luchamos en su día contra los padres de los que gobiernan y ahora lucharemos contra sus hijos». Esta es la forma en la que el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, interpreta su particular memoria histórica y, ya de paso, anuncia el tono de sus relaciones con el PP, que le han convertido en su «bestia negra».
Fue uno de sus antecesores en el cargo, José María Michavila, el que más se escandalizó con el aterrizaje de Bermejo en Justicia, hasta el punto de que llegó a recomendar a su partido que no llegara a ningún acuerdo con este Departamento si seguía al frente Bermejo.

No es para menos. Ambos acabaron en los tribunales siendo el primero fiscal jefe de Madrid. Fue en marzo de 2003, gobernando el PP, cuando la fiscalía General del Estado abrió diligencias al hoy ministro por decir que la ley de juicios rápidos fracasaría por falta de medios. Michavila interpretó que se declaraba en rebeldía y Bermejo acabó llevándolo a los tribunales por atentar contra su honor. El TS absolvió a Michavila, pero las heridas de uno y otro ya estaban abiertas.

No fue, sin embargo, el inicio de la enemistad manifiesta del PP con el ministro cazador. El partido acumula datos y fuerzas, y asegura que nunca ha sido bien visto ni entre sus propios compañeros de carrera, puesto que no le han apoyado para ninguno de sus destinos. También dicen, en un dossier de 15 páginas al que ha tenido acceso ABC, que «es el fiscal al que más querellas le han inadmitido» en los Tribunales.

En 1996, la Fiscalía de Medio Ambiente de Madrid -a las órdenes de Bermejo- demandó al Ayuntamiento por la puesta en marcha de la incineradora de Valdemingómez, causa que fue sobreseída ocho años más tarde. De paso, Bermejo dejó un reguero de enfrentamientos con el entonces alcalde, José María Álvarez del Manzano, y con la ex ministra de Medio Ambiente Isabel Tocino. Era una forma de calentar motores: a partir de 2033 sube el tono del enfrentamiento.

El PP le acusa de haberse puesto al servicio de la candidatura del socialista Rafael Simancas en 2003 después de que éste anunciara que «si él se demuestra dispuesto, colaborará con el gobierno regional que yo presida». Fue la época del «tamayazo», también el momento en que la Fiscalía llegó a abrir diligencias contra 11 ayuntamientos de Madrid gobernados por el PP. De ninguna de estas investigaciones «se ha tenido noticia. No hubo imputaciones, ni querellas ni nada de nada», señala el documento.

Bermejo y Aguirre también han tenido ocasión de verse las caras, una de ellas cuando el primero le acusó de «prevaricación y falsedad» por la tala de 2.094 árboles en la ampliación del Club de Campo de Madrid. No quedó nada del caso. Lo mismo pasó cuando la citó como testigo por el vertedero ilegal de Las Cárcavas (Madrid). Casualmente esta comparecencia coincidía también con unas elecciones: en esta ocasión, las generales de 1996.

La baja laboral de su esposa
Ya siendo ministro, el PP le acusa de que las leyes «no valen»para él y echan mano de sus cacerías en Andalucía sin la preceptiva licencia o del hecho de que su esposa, funcionaria de baja laboral, se fuera de campaña el año pasado a Murcia, lista que Bermejo encabezó con un descriptible «éxito» electoral. Ha sido precisamente allí donde su presencia se ha dejado notar más: hasta 40 causas abiertas por la Fiscalía en Murcia han sido sobreseídas o desestimadas. El ministro ha utilizado «su posición al frente de Justicia en beneficio del PSOE y en conexión con el Ministerio Público para iniciar (como ahora) procedimientos contra cargos del PP en periodo preelectoral».