Mora - Toledo

La Luna es “mentirosa”.
Independientemente de las fechas, es decir de los días del mes para reconocer su ciclo, hay que tener en cuenta siempre que la Luna es mentirosa.
Si su forma en los cuartos es de una C (lo lógico sería pensar en Creciente) es menguante. Si su forme es de D (lo lógico es pensar en Decreciente) es creciente.

Se dice también que cuando tiene forma de CUNA o de BAÑERA y en 48 horas cambia de postura a la vertical está anunciando lluvia. El Agua que derrama al ponerse vertical.

De la misma manera que anuncia cambio de tiempo a frío o humedad cuando las vemos con cerco. Es la primera en “taparse”.

¿Por qué cambia de fecha la semana Santa?
La Luna tiene la Culpa:
A partir del Concilio de Nicea (325 d.C.) se estipuló conmemorar la muerte de Jesús el mismo día que lo relatan los evangelios, y como en aquellos tiempos, al igual que hoy, se regían por el calendario lunar, empezó a celebrarse el DOMINGO DE PASCUA o RESURRECCIÓN el siguiente a la primera luna llena de Primavera. Es decir, el primer Domingo que sigue a la decimocuarta noche de lunación, según el calendario judío
Como el primer día de esta fase lunar se sitúa necesariamente entre el 8 de marzo y el 5 de abril, la fecha de la Pascua cae entre el 22 de marzo y el 18 de abril, según el criterio generalizado en aquella época, de utilizar el mes lunar (29 días).

Veamos:

8 de marzo + 14 días = 22 de marzo (fecha más temprana)
5 de abril + 14 días = 18 de abril (fecha más tardía)

Calculando de otra manera:
20 de marzo (último día de invierno) + 29 días = 49
49-31 = 18 de abril
Con el fin de que no hubiera coincidencia con la festividad judía de la Pascua, y evitar confusiones y paralelismos entre las dos comunidades religiosas, se añadió una semana: 35 días en total, entre los cuales puede caer el Domingo de Resurrección.

18 de abril + 7 días = 25 de abril (fecha tope) Para un Domingo de Pascua. Este año casi se cumple. Será una de las pocas veces que más cerca ha estado de cumplirse.

Madre mia cucharas cuanto calculo para la luna, yo soy mÁs de embobarme en ella una bonita noche de julio, o de mirarla cuando estoy triste, o de llorar frente a ella cuando los problemas me agobian; pero a partir de ahora la verÉ de otra manera...gracias