Ley de Emprendedor “SL”: Un lobo con piel de cordero No es “oro todo lo que reluce” y la nueva ley de emprendedores (Ley 14/2013, de 27 de septiembre, de apoyo a los emprendedores y su internacionalización), no iba a ser una excepción. Su artículo 7, introduce una nueva figura jurídica en el mundo empresarial/emprendedor , una figura que dará mucho que hablar: el emprendedor de responsabilidad limitada. A primera vista vemos un emprendedor al que se le facilita el camino, eximiéndole de responsabilidad sobre sus deudas, en el campo profesional; pero no nos engañemos, porque no todos los emprendedores tendrán acceso a este tipo de facilidades. En concreto habría que destacar uno de esos límites aunque considero que es el fundamental: Art.7.2. "Podrá beneficiarse de la limitación de responsabilidad la vivienda habitual del deudor siempre que su valor no supere los 300.000 euros, valorada conforme a lo dispuesto en la base imponible del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados en el momento de la inscripción en el Registro Mercantil". Así pues, si la vivienda habitual supera los 300.000€, no podrá evitar que su casa sea embargada, en caso de contraer deudas por sus actividades profesionales. Ahora viene el problema y es que la valoración de la vivienda, debe haberse hecho en el momento de inscripción en el registro mercantil. Si soy emprendedor desde hace ya años y coincide que mi negocio comenzó antes de que explotara la burbuja inmobiliaria, es muy probable (basándonos en las estadísticas de precios y ventas de viviendas del ministerio de vivienda) que mi casa, como emprendedor registrado antes de la crisis, tuviera un precio superior al actual y en muchos casos superando los 300.000€ y por tanto quedamos fuera de esta "tan favorecedora" nueva figura jurídica A partir del 2007 los precios por metro cuadrado comienzan a descender. Observando las estadísticas de vivienda y trabajo desde los años en que comenzó la crisis económica, podemos ver como el descenso de las altas de autónomos en España, guarda UNA “EXTRAÑA” relación con el descenso del precio por metro cuadrado de la vivienda. Esto nos lleva a que aquellos empresarios, gracias a esta maravillosa norma, se vean sometidos al anterior régimen y por lo tanto esta ley sea meramente ANÉCDOTICA Manuel Almarcha |