Rajoy aparca el patriotismo. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha pasado por encima de las tensiones territoriales con Ceuta y Melilla y de las reivindicaciones del pueblo saharaui, para tratar de capitalizar las relaciones económicas en la primera cumbre en cuatro años entre los jefes de los Ejecutivos de España y Marruecos. Rajoy, que se ha reunido este miércoles en Rabat con el rey marroquí, Mohamed VI, y el primer ministro, Abdelilá Benkirán, ha tratado en casi en exclusiva acuerdos económicos, sobre todo referentes a la exportación de empresas españolas al país magrebí. De lado han quedado las tensiones territoriales, alentadas en las últimas semanas con las ocupaciones de territorios españoles por parte de organizaciones marroquíes en las costas africanas, como el peñón de Vélez de la Gomera o del islote de Perejil. En rueda de prensa, el presidente español ha afirmado sentirse "muy agusto, como uno se siente en casa de un amigo", y ha destacado el "cariño y respeto mutuo entre las casas reales de nuestros países". En lo que ha sido su segunda visita este año al país musulmán, el presidente español ha expresado su voluntad de acudir con frecuencia al país vecino para continuar con esta "nueva etapa en las relaciones bilaterales". |