Gerindote - Toledo

Otra montería de la caverna mediática. Hay que cazar como sea al juez Gómez Bermúdez. Primero cayó el juez Baltasar Garzón. Ahora intentan desde Génova 13 que caiga también el juez Gómez Bermúdez. El PP se defiende -a capa y espada- de los jueces que pretenden esclarecer la verdad de la trama Gürtel. No colaboran con la Justicia. La bloquean pro domo sua.

La teoría de la conspiración
A Gómez Bermúdez la ultraderecha no le ha perdonado que investigara la autoría de la matanza del 11-M y desmontara así la teoría de la conspiración. Creyeron en un principio, Pedro J. Ramírez y sus satélites, que Gómez Bermúdez era ideológicamente de los suyos. Pero se equivocaron.

Inasequible al desaliento
Ahora quieren cazar, como sea y pronto, a Gómez Bermúdez. El Gran Capitán de esta nueva cruzada es el director actual de ABC, Bieito Rubido, un buen discípulo, según parece, del célebre manipulador, Luis María Anson. Ésta es –en estado puro- la derecha española, inasequible al desaliento.
La derechona de toda la vía
Forman parte de esa derecha –de la derechona de toda la vida- los hijos, nietos o bisnietos de la histórica hazaña del traslado en avión del general Francisco Franco desde las Islas Canarias a Tánger.

Un magnate corrupto
El financiero March, un magnate corrupto de aquella época, le dio un cheque en blanco al marqués de Luca de Tena, propietario del diario ABC, icono de los partidarios del Antiguo Régimen. El avión mencionado fue decisivo para poner en marcha el golpe de Estado y, de inmediato, la guerra civil. La España fascista/falangista derrotó a la España republicana.

Búsqueda y captura


Desde la derecha mediática, judicial, política y eclesiástica se ha abierto el proceso de la búsqueda y captura del magistrado Javier Gómez Bermúdez. El castigo brutal a Baltasar Garzón frenó en seco algunas importantes vías que entonces conducían al conocimiento a fondo de la trama Gürtel.

Estocada final


Ahora los herederos del Antiguo Régimen pretenden la estocada final. Aparcado Gómez Bermúdez a empujones mediáticos y políticos, la justicia podría ser acallada para favorecer los intereses económicos del PP. Lo hicieron en el caso Naseiro y lograron su objetivo de mirar hacia otro lado.

Vergüenza colosal


Todo este montaje de Mariano Rajoy y su equipo de gurús es una vergüenza colosal. En su operación para defender de hecho a los corruptos populares se incluye prioritariamente difundir el descrédito orientado desde Génova 13 contra la periodista Elisa Beni, casada con el juez Gómez Bermúdez. La temen, entre otras cosas, porque sabe demasiado de un asunto tan turbio como el de la Gürtel. Y porque Beni no tiene pelos en la lengua.

Eliot Ness y los intocables
Temen Rajoy y los suyos a Bermúdez y tratan de destruirlo. Lo mismo, o similar, hicieron -salvando todas las distancias- los gánsteres de Chicago año 30. Procuraron cargarse a Eliot Ness y sus intocables. No lo consiguieron. Hemos de impedir, pues, que disparen contra Gómez Bermúdez, si creemos en el Estado de Derecho. Y en la democracia, a la que vulneran una y otra vez Rajoy, Cospedal y su alegre muchachada de mentirosos compulsivos.

Enric Sopena es director de ELPLURAL.COM