Versos - El lobo El lobo nos daba miedo cuando éramos pequeños y recuerdo que hasta en sueños formaba parte del credo que escuchaba en mi niñez, pues era por lo común el animal que según escuché más de una vez, venía si no eras bueno y hasta el monte te llevaba y allí te despedazaba entre rugidos de trueno. Se comía alguna oveja oí decir a un pastor y hasta te daba terror en los cuentos de Calleja. Sus dientes eran de sierra y me contaba un muchacho que vio una vez a un borracho al que le tiró por tierra, dándole después un sobo y le dejó tan contuso que al muchacho se le puso el pelo de “ver al lobo”, que era como se decía de aquel pelo mal peinado que no iba hacia ningún lado, sino que arriba subía. Pero ya no hay lobos de esos, que ahora son más complacientes, los trituras con los dientes y no dejas ni los huesos, pues de ellos un atracón te pegas por Navidad y es que ahora en la actualidad los convierten en turrón. Se volvió tan inocente que en la casa se metía cuando a la “tele” venía con Rodríguez De La Fuente. Cristino Vidal Benavente. |