Versos - La cigueña Ya retornó la cigüeña a su nido de la torre; ahora peligro no corre de ser de la torre dueña. Mucho tiempo estuvo afuera sin regresar a su casa, por algo que ahora no pasa que esto no es ya como era. Sin oír tu castañeteo en el pueblo hemos estado y en falta lo hemos echado al igual que tu aleteo cuando te vas o regresas, al salir cuando despegas y cuando contenta llegas después de cazar tus presas. Cuando el verano se marche de nuevo al África irás y en febrero volverás aunque todavía escarche. Donde el instinto te envíe certeros serán tus vuelos, navegando por los cielos sin brújula que te guíe. Y volverás muchas veces a este pueblo que es el tuyo y crecerá nuestro orgullo porque al pueblo perteneces. Cuando a la torre no vengas porque te hayas muerto ya, el nido lo ocupará quizá algún hijo que tengas. Los mismos recibimientos tendrá, como tú los tienes cuando a nuestro pueblo vienes y así todos tan contentos. Si tú faltases un día nos vendría la tristeza y la torre su majeza seguro que perdería Cristino Vidal Benavente. |