Versos - Máximas 16 Aquel que te santifica en contra de lo que siente, se le ve muy bien que miente usando la boca chica. Si me pretendes hundir usando todas tus fuerzas, más te vale que te tuerzas, pues no lo has de conseguir. No hace falta ser muy listo para saber de qué pie cojeas, pues se te ve ahora y siempre se ha visto. Si quieres que alguien te crea, opina con claridad y ajústate a la verdad por muy molesta que sea. No te vendas ni por nada, ni por mucho, ni por poco, aunque opinen que estás loco pudiendo sacar tajada. Todo el mundo no es igual, no me canso de decirlo y el hecho de no admitirlo muestra que se es radical. La vida es una carrera de lo malo hacia lo bueno a la que nadie es ajeno, verdad de la verdadera. Si te sacan de la rueda no te extrañes que lo hagan, lo hacen así, porque pagan con esa misma moneda. Cuando la razón te den y no merecerla sabes, por mucho que los alabes sabrán que no obraron bien. Para curar la falacia, no encontrarás la tableta que figura en tu receta, pues no se vende en farmacia. Por la boca muere el pez, pues aunque ahora te desdices tú diste las directrices desde la primera vez. No sé que será peor cuando te has equivocado, si culpar al empedrado o enmascarar el error. Qué listos somos nosotros, que las maldades que hicimos escondidas las tuvimos y ahora salen con los otros. Consejos los da cualquiera y con muy buena intención, pero todos en montón irán a la papelera. Si me gritas no te entiendo, tampoco si me hablas quedo, así que me importa un bledo aquello que estés diciendo. Viste muy bella una cosa y aunque te parezca extraño, se cambió al color castaño siendo antes color de rosa. No cojas lo que no es tuyo, que ningún derecho tienes y si a eso no te avienes irás a parar al trullo. De la palabra nobleza existen dos acepciones, una habla de corazones, la otra es de menor grandeza. Olvídate de alharacas cuando vengas a pedirme, pues en viéndote he de irme, que más que pedir, atracas. Aunque veas que otros hicieron lo que tú nunca pudiste, no es para ponerse triste, simplemente es que pudieron. Cristino Vidal Benavente. |