VERSOS - LA NOCHE MÁS FELIZ Quiso alargar la noche mi ventura, pues estaba llegando al paroxismo que siendo tú y yo dos, era uno mismo fundidos en la misma soldadura. Recuerdo que abrazaba tu cintura y tú estabas proclive al mimetismo, de modo que hasta incluso en el sadismo bebimos, pues nos pudo la locura. El tiempo se acababa por desgracia y entonces nos dijimos que sería mejor aprovechar la pertinacia propia de nuestro amor y así vendría la llegada al confín de la eficacia, hasta ver el albor del nuevo día. Contigo, qué no haría, que hasta el cielo cambiara y no te miento por volver a vivir aquel momento. Cristino Vidal Benavente. Mi blog: cristino-poesia.spaces.live.com
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