Versos - POR FILIPINAS, NUESTRA LEJANA HERMANA Mi abrazo caluroso al pueblo hermano de Filipinas, ante la desgracia debida a la insufrible pertinacia del maldito huracán, siempre cercano, siendo este último el que más ufano de todos se ha mostrado, pues su marca subió tantos enteros, que una charca el mayor de los mares parecía ante la furia que el tifón traía, colmando los deseos de la parca. Si no son terremotos, son volcanes, o tsunamis, incendios y tifones, naufragios y también inundaciones, los que constantemente los afanes aumentan de este pueblo, que titanes tienen que ser para aguantar el fuerte vendaval de desdichas que la suerte les manda sin aviso y con frecuencia, minando sin cesar la resistencia de quienes quieren evitar la muerte. Ellos son los hermanos orientales de nuestra gran Comunidad Hispana, española y también americana, con lenguas y creencias pariguales y juntos hemos de paliar sus males mandando nuestro apoyo y nuestra ayuda, para que en forma de dinero acuda a remediar en lo posible todo aquello que se pueda, codo a codo, sin que uno solo tal deber eluda. Cristino Vidal Benavente.
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