No hago más que escuchar que si crisis por aquí, crisis por allá… Cuando en realidad estamos viviendo aún en el paraíso.
Amigos, siento informales que no hay crisis (al menos por ahora), esto es sólo un preámbulo de lo que se avecina. Así que por favor no hagan caso a los que pasan el día llorando por algo que no ha llegado aún.
Como se nota que en Europa, vivimos la última crisis hace tanto tiempo que no tenemos memoria de lo que es realmente es experimentar una. Ahora, con cualquier indicador que se presente a la baja, nos asustamos como si el mundo se nos viniera abajo.
Prácticamente pasé todas las vacaciones escuchando por doquier que estábamos en crisis, pero con muy pocos españoles pasándola en casa. Si todavía podemos irnos de vacaciones aunque sea a la playa más cercana, significa que no estamos en ninguna crisis.
Crisis son las que pasan en otros países y regiones del mundo (no las nombraré pues las conocemos bien gracias a los medios). En esos lugares la gente ya no le da importancia a esa palabra, pues su crisis se ha convertido en crónica, por lo que para ellos “crisis” es un día “normal” en sus vidas. Así que si vives bajo techo, si puedes alimentarte a ti mismo y a los tuyos y si tienes un trabajo ó tienes las condiciones para encontrar uno, siento decirte que no estás viviendo ninguna crisis, así que no sigas dejándote influenciar por los medios.
Por otro lado y sin ánimos de inclinarme hacia ningún sector político (ya que soy indiferente a la política), creo que ambos están equivocados, pues ninguno (que yo sepa) tiene la bola mágica para saber cómo nos irá el año que viene o el próximo. Así que como nadie sabe lo que nos depara el futuro, no entiendo por qué siguen publicándose artículos sensacionalistas que afirman una cosa o la otra.
Es cierto que han subido los niveles de paro, los precios del petróleo, los intereses hipotecarios y la inflación, por nombrar algunos indicadores. Pero esto no implica que necesariamente nos tenga que seguir yendo mal, pues existen otros factores que se entienden como compensatorios y que pueden hacernos retornar a “mejores” panoramas, como la estanflación, pero como dije antes… esto nadie lo sabe.
Me parece irónico que la misma gente que se quejaba hace unos años de los altos precios de la vivienda y del abuso constante de las inmobiliarias e instituciones financieras, siga quejándose ahora de que hay crisis …¿No querían que bajaran los precios?
No puedo creer que no les entre un gustito el hecho de saber que las inmobiliarias, que tanto daño han hecho a este país, estén ahora sufriendo su merecido calvario y que los bancos se estén llenando de impagados por culpa de sus prácticas abusivas. Pues a mi si me entra un gustito saberlo.
Según mi opinión personal, la peor parte está aún por venir y se evidenciará con mayor fuerza a comienzos de 2009 y lo más seguro es que finalice a mediados de 2010. Durante este periodo, es seguro que la economía se ralentizará por lo que entraremos en un proceso de recesión general. Esto traerá un aumento de los despidos, más aplazamiento de hipotecas y mucha información basura, con los medios de comunicación sacando jugo (sucio) sobre el tema y en plan tragedia a diestra y siniestra.
Lo mejor que podemos hacer, es no caer en actitudes derrotistas ni dejarnos influenciar por los rumores, hay que entender que estaremos pasando por una coyuntura normal en todos los ciclos económicos; que como olas del mar, van pasando desde la cresta al fondo de forma cíclica, con una periodicidad determinada sólo por los juegos de la economía mundial y a veces por culpa del azar.
Hemos entonces de tratar estos síntomas como señales de alerta, para que luego nos ayuden a prevenir males mayores o para saber como sobrevivir si pasan a peor. Así que debemos estar atentos y ser precavidos para evitar que nos afecte en la medida de lo posible y al mismo tiempo, tendremos que ser muy conscientes de lo que sucede para no caer en el juego de las exageraciones.
Si convertimos en tragedia un pequeño cambio, como el que muchos de nosotros experimentamos hoy. No quiero ni imaginar si llegamos a encontrar cambios más radicales en el futuro. Es importante aceptar que los cambios son parte de la vida misma y que debemos adaptarnos a ellos para sobrellevarlos mejor. No los podemos evadir y mucho menos eliminar criticándolos, así que es mejor aceptarlos y convertirlos en oportunidades que nos permitan mejorar.
Todo esto que está sucediendo hoy y que sentimos que nos afecta podría significar una oportunidad, para convertir lo negativo en positivo, ya sea que hablemos del plano personal como en el plano empresarial. Para ello he reunido una serie de consejos que podrían ayudar a prepararse tanto a las personas como a las empresas, para lo que se avecina y que nos vienen bien para paliar la situación de recesión actual.
MANUAL ANTI CRISIS – CONSEJOS PARA LOS TRABAJADORES
De la Web de autoayuda Pick The Brain (en inglés) y apoyado en un traducción previa de El Inconformista, he extraído un listado de útiles consejos, que aunque en principio puedan sonar básicos, considero que son esenciales para estar preparados y poder afrontar el temporal que se avecina… Recuerda que Animis opibusque parati.
Se flexible: Una crisis económica puede implicar un cambio de rumbo, así que es posible que perdamos nuestro trabajo o nos enfrentemos a una merma en nuestros ingresos. El cambio forzado no suele ser bienvenido, pero, si somos flexibles al cambiar las circunstancias seremos capaces de enfrentarnos a cualquier nueva situación en el futuro. La flexibilidad es particularmente importante en la actualidad económica en que vivimos, ya que quedan pocos trabajos fijos “para toda la vida”.
Mejora tus habilidades: Busca oportunidades para desarrollar habilidades acordes a las tendencias actuales como: Sistemas informáticos, idiomas, nuevas tecnologías, etc. Son estas cualificaciones las que te ayudarán en una posible búsqueda de trabajo y/o en mantenerte en el que tienes actualmente.
Ten la mente abierta: Sólo por que has tenido un trabajo a tiempo completo durante los últimos 10 años, no significa que lo tendrás para siempre. Es importante estar abierto a nuevas ideas y conceptos, de forma de evitar cerrarnos inconscientemente a nuevas oportunidades o vías de hacer dinero.
Mantente dispuesto a cambiar de residencia: Cualquier crisis está centrada en regiones concretas ó en ciertos sectores de la economía, así que no descartes tener que emigrar.
Mira más allá de tu sector: Especialmente algunos sectores como la construcción y la fabricación de coches, por ejemplo. Son víctimas de la actual recesión. No luches una batalla perdida, si te quedaste sin empleo en un sector determinado, busca en sectores diferentes. Siempre puedes considerar cambiar en función de tu propio beneficio.
Intenta trabajar para ti mismo: El autoempleo es una de las áreas que más ha crecido por su gran potencial. Involucra más riesgo, pero, ofrece más oportunidades.
Sé optimista: El optimismo evita los pensamientos negativos y desesperados sobre tu situación. Nunca te rindas y mantén la esperanza; si te sientes deprimido por tu situación, intenta hablar de tus problemas con un amigo o un asesor financiero. El desempleo puede ser muy estresante, asegúrate de que tus relaciones no sufren; si hablas de forma honesta con tu pareja conseguirás que te entienda y que te ayude.
Se válido para tu empresa: Si tu empresa piensa que el 10 % sobra, hazte indispensable. Siempre hay algo que hacer para evitar la sensación de ser prescindible. Busca la manera de minimizar este riesgo.
Mejora tu presencia: Esto demuestra que te importan los demás. Si no te ocupas por vestir adecuadamente, la empresa podría pensar que tu actitud es perjudicial. Vístete bien, y mantén un mínimo de arreglo personal, incluyendo la higiene y la limpieza en todos los aspectos de tu vida.
Muéstrate alegre: Simple pero efectivo. Si eres un buen trabajador y te llevas bien con la gente, nadie querrá deshacerte de ti. Pero si creas problemas y molestas a los demás. No lo pensarán dos veces cuando haya una oportunidad de echarte.
Se increíblemente útil: Busca maneras de hacer frente a las dificultades de la compañía y sacas de la manga propuestas que vayan en busca del beneficio de la misma, estarás en una posición de ventaja. Conviértete en una solución y jamás en otro problema.
Evita contagiarte de la exageración de los medios: No hay que negar que la economía va mal; pero a no ser de que ya tengas tus ahorros en acciones en hipotecas de alto riesgo, no es el final del mundo. Los medios tienden a exagerar las noticias negativas y por lo general se centran en las estadísticas más dramáticas. Las comparaciones con la gran depresión se vuelven comunes. Pero, las cosas no están tan mal (al menos todavía…).
El punto es mantener la perspectiva y no volverse en exceso preocupado por la situación de la economía. Es un tiempo de incertidumbre y de bajón en el nivel de vida, pero en las recesiones la mayoría de la gente no pierde su trabajo, las recesiones no duran para siempre y la vida continúa.
Ocúpate de las deudas: Si tienes una montaña de deudas, recuerda que es importante no enterrar el problema con la esperanza de que se irá. Pues no se irá. En lugar de ello, habla con un asesor financiero e idea un plan acorde con tu caso.
Un despido - una oportunidad: Un despido, especialmente para aquellos por encima de los 40, puede ser un evento deprimente que podría conducirnos a vorágine de negatividad total y de allí, quién sabe a dónde. Si en cambio, nos mantenemos flexibles y conservamos una actitud positiva, podemos convertir al despido en una oportunidad inesperada.
Este tipo de eventos forzados nos ayudan a iniciar nuevas estrategia, que posiblemente nos lleven por caminos por los que nunca habíamos pensado transitar.
Combate la inflación: Las crisis vienen acompañadas de inflación y de un encarecimiento general de los productos y servicios. Así que intenta desde ahora mismo una serie de medidas efectivas que te ayuden a reducir los gastos como por ejemplo:
- Busca formas alternativas y más económicas para ir al trabajo.
- Reduce todos los gastos innecesarios posibles.
- No pidas prestado para mantener tu estatus. Baja de estatus que nadie se muere por eso.
No malgastes energías quejándote: Podemos pasar horas hablando de los errores del gobierno y quejándonos del incremento del costo de vida, pero eso no va a mejorar nuestra situación. Necesitamos realizar acciones concretas para intentar solucionarla. La adaptabilidad es la clave para poder superar cualquier situación por terrible que parezca.
El dinero no lo es todo: Si juzgamos nuestra calidad de vida únicamente por nuestra situación financiera, entonces una simple recesión nos hará sentir miserables. No hay que poner tanto énfasis en lo material. Que suba el precio de la gasolina no es motivo por si mismo para ponerse a llorar. Hay muchas más cosas importantes en la vida que el dinero que tenemos en el banco… Encuéntralas y encuéntrate.
Reflexión:
Es cierto que la crisis viene y es muy seguro que serán muy pocos los que escapen a ella… Pero la buena noticia es que sabemos que viene y eso nos permite estar preparados. No desperdicies la oportunidad de ser el que mejor sale parado de ella y no te preocupes tanto, pues durará sólo un par de años.
Fuentes:
zapatero dimite que no te aguanto mas eres anticrito personificado,esto es lo que sembrais socialistos el caos y la destruccion un saludos amis compis de lucha que los tengo unpoco olvidados dentro poquito ya estare po aqui defendienfo lo que es del puebloooooo ,
