Casarrubios del Monte - Toledo

Entre cucarachas y ácido bórico, Rajoy se ha hecho otro lío

¿Por qué no pide el PP disculpas, tras la sentencia contraria a los conspiradores del 11-M, a los que la derecha apoyaba?

¡Menudo revolcón judicial -y van dos en poco tiempo- para los hechiceros de la tribu amarilla! ¿Con qué nos distraerán ahora estas gentes que, infatigables en sus obsesiones y sus delirios de grandeza, se inventan parte de la realidad casi a diario para vender más periódicos, atraer más oyentes y, por otra parte, influir decisivamente en la estrategia de la derecha española? De momento, siguen entretenidas, jugando con fuego -les da igual que su manifiesto de fakires de feria sea verdad o mentira-, a salvadores de la lengua española.