Valdeconejos - Teruel

Solamente he visitado en una ocasión este pequeño y bello pueblo de la provincia de Teruel en las faldas de la sierra de San Just, esa serranía que limita la cuenca de Utrillas, en las cuencas mineras. Un pueblo que, como tantos otros, ve como poco a poco se va mermando su población. Un proverbio dice que quien no avanza, retrocede; y aunque Valdeconejos hace muchos años que está retrocediendo en cuanto a población, sus oriundos, los que allí han nacido y sus descendientes, pasean el nombre de su pueblo con orgullo, y son personas afables y dignas.
Tuve la suerte de conocer a la señora Piedad Ibáñez q.e.p.d., una persona de extraordinarias cualidades humanas y de una virtud encomiable. Me une una sincera amistad con su hijo Conrado Ortel, con quien visité el pueblo, recorriendo sus cuestas y descansando a la puerta de la casa que aún mantiene en el pueblo, escuchando los sonidos de un atardecer de verano.
Además conocí hace muchos años a otro hijo del pueblo: Israel Martín, también desaparecido. Estuvimos durante muchos años prestando los servicios de nuestras respectivas clases en la misma localidad y disfrutamos de una amistad mutua y sincera. Después me enteré de que había pertenecido, junto a sus hermanos, a los gaiteros de Valdeconejos, una orquestina que amenizaba hace tiempo las fiestas de los pueblos aledaños.
Muchas veces me he preguntado el origen del topónimo que da nombre al pueblo, pero no hay que estrujar mucho la imaginación para deducir que, en tiempos, aquel valle debió de estar poblado por esos simpáticos mamíferos roedores.
Un cordial saludo a todos los valdeconejinos.

Hola, soy hijo de Israel Martín, y por casualidad he encontrado su comentario, el cual me evoca buenos recuerdos, dice que dieron clases allí, me pregunto si nos conocemos personalmente. Muchas gracias por guardar la memoria de mi padre y la de su pueblo, del cual estaba tan orgulloso.
Luis Martín