Samper de Calanda - Teruel

Entre tanta copa y canapé llegué a casa cansado, sin ganas de ni siquiera sacar las llaves para abrir la puerta. Esa clase de fiestas a las que debía acudir por compromiso social y financiero me estaban matando.
"Debo dejar esta vida, estoy derrochando el tiempo sin sentido", pensaba para mis adentros mientras iba hacia el aseo. No entiendo por qué debo entregar mi vida a una empresa, vivir constantemente pensando en negocios, tratos, incluso en sueños. Pero n puedo dejarlo, la dependencia es equiparable a la de la droga más potente, la ambición ciega de tal forma que olvidas familia, amistades, tiempo libre.
Entre tanto pensamiento llegué al aseo, abrí la puerta y presioné el interruptor. "Otra bombilla fundida", pensé cuando la intensidad de la luz me pareció menor de lo habitual. "Ya van dos este mes".
Me lavé la cara y me miré en el espejo, como queriendo que, además de la suciedad, el agua también se llevara todo aquello que me estaba ocurriendo.
Me eché a la cama, con un sólo pensamiento en la cabeza: Mañana todavía es Martes, hay que joderse.

chapo nen vaya peazo historia, pero amos a mojarnos de ahora en adelante ahi que ponerles titulo.
"2d2" acabada